Watching openings ||One Piece||

IV || Bon voyage ||

POV Narradora 

—Muy bien. La sección de preguntas termina aquí. Luego haré otra.

—¿Y cuando sería eso?— Preguntó un marine. Todos prestaron atención, pues tenían muchas preguntas que querían hacerle a la joven.

—Pues no sé, cuando se me de la gana supongo. 

La mayoría solo la observó con el ceño fruncido, mientras que el resto la ignoraba. Andrea soltó una pequeña risa. 

—Por cierto, mi hermana no estará aquí por un tiempito. Está trabajando en sepa Dios que, en el sótano. Volverá luego de un tiempito.

—¿Y las mantas y almohadas?

—No lo sé. 

Seguidamente, la de ojos verdes se dio la vuelta y la pantalla comenzó a reproducirse el nuevo opening. Todos se resignaron a preguntarle algo, se callaron y observaron atentamente la pantalla, en la cual, una melodía comenzaba a sonar.

-Kono umi no hateni suggei takara ga harutte shiterukka?-

-Sore wo teni irete yatsu ga kaizoku o ni narerunda-

-Waku waku stei ka!-

-Kiita koto mo nai bouken ga matterutte yundaze-

Las personas miraban fijamente la pantalla. Lo único que podían decir es que vivían la vida al máximo. A pesar de que solo se mostraron pocas fotos, en esas era clara la felicidad. Se les miraba muy felices y disfrutaban con la compañía de los otros. Algunos marines sintieron envidia. Ellos no tenían esa clase de lazos con sus compañeros de trabajo, incluso llegan a odiarse entre si debido a que quieren ser de los grandes mandos; almirantes. 

Los civiles se mostraban en shock ante las fotos de la pantalla. Se estaban divirtiendo, y eso era lo que ello encontraban sorpresivo. Ellos pensaban que la diversión a vista de los piratas era el robar, matar y esclavizar personas, pero esos piratas se estaban divirtiendo como... personas normales. ¿Será que en realidad así son los piratas? Teniendo en cuenta la revelación de la buster call, que los piratas fueran normales, y hasta cierto punto, buenos, no sonaba loco. O por lo menos, eso era lo que pensaban los que no han vivido en carne propia lo que es el atraco pirata.

Mientras, los piratas, con muy pocas excepciones, se sentían identificados con esos chicos. Roger comenzó a reír un poco ante esas imágenes. Sentía que esa pequeña tripulación se parecía un poco a la suya. Y eso le agradaba. Y el pequeño chico con su sombrero le cayo bastante bien. Su voz era una repleta de pureza e inocencia. Y, exactamente por esa misma voz, la chica que estaba al lado de Dragon despertó.

—¿Huh? ¿Dónde estoy?

—Finalmente despiertas, Rose.— Dragon la volteó a ver con su cara neutra.

—Ah, Dragon. ¿En donde estamos?

Dragon solo soltó un suspiro y le explicó a su esposa de forma rápida, concisa y precisa lo que estaba pasando.

—Vamos a ver el futuro.

—Ah...

Rose se quedó callada mientras parpadeaba repetidas veces; analizando lo que dijo su marido. Luego de unos segundos, sus ojos brillaron de sobremanera.

—¿¡En serio vamos a ver el futuro!? ¡¡Geniaaaal!!—Gritó con euforia mientras se levantaba del suelo de golpe. Dragon cubrió sus oídos con dolor.

Todos voltearon a ver a la chica que había gritado. Dragon maldijo internamente lo escandalosa que podía llegar a ser su esposa en... casi todas las ocasiones. La capucha de la chica se deslizó hasta dejar su cara al descubierto. Un bella chica de cabello negro y ojos del mismo tono. Piel bronceada y un lunar debajo de su ojo izquierdo.