❝No es quien te "vuelve" gay, es quien te hace aceptarlo.❞
↬ Lee Felix es el mejor amigo de Hwang Hyunjin, o eso piensa él, hasta que empieza a ocultarle cosas. Sin embargo, no se espera que el secreto del menor termine por enredarlo en una red de...
si en la historia original decía capitulo especial, yo también digo que es un capitulo especial
Estaba equivocado, mis sentimientos eran erróneos. Me hacían sentir sucio, que no merecía tener interés en alguien.
No tenía caso de todas formas; jamás era opción. Nunca lo era.
ㅡSiempre vienes aquí, te sientas en el mismo sitio con tu mismo amigo a beber helado mientras ríen a carcajadasㅡuna voz perezosa llegó hasta mis oídosㅡSin embargo, hoy estás aquí solo. Y con una expresión deplorable.
Un chico medianamente alto de cabellera rosa me miraba con curiosidad, mientras bebía lo que lucía como una malteada.
ㅡ¿Acaso me vigilias? ㅡ interrogué quisquilloso, sin desear contarle mi vida privada a un desconocido.
ㅡTrabajo en la tienda de discos que está justo detrás de nosotros, te he visto. Eres difícil de olvidarㅡaportó, sin pizca de vergüenza.
Sentí mis mejillas calentarse ante aquella declaración, tratando de convencerme que era sólo un comentario sin importancia.
ㅡNo he venido solo, espero a alguienㅡmentí con defallatez, sin querer sonar absurdo.
ㅡAjá, y mi jefe es un encanto ㅡbufó, desbordando sarcasmoㅡ ¿Problemas en el paraíso?
Me rendí al notar que aquel peculiar desconocido no iba a ceder, de todas formas no parecía un mal chico.
ㅡYo no le llamaría "paraíso", aunque es algo asíㅡrespondí con la mirada baja, ahogando un suspiro de pesadez.
ㅡ¿Entonces cómo lo llamarías?
ㅡNo importa, de todas formas es estúpidoㅡtraté de sonar borde, para evitar profundizar en el tema.
ㅡTe tiene con esa deplorable expresión desde hace más de una hora, a mi me parece algo serio. Sin embargo, está bien si no quieres hablar de elloㅡuna apenas perceptible sonrisa iluminó su rostro, haciéndome mirarle con sorpresaㅡ Vamos, te invito un helado.
Esa tarde conseguí un nuevo amigo; él saldría de su trabajo durante su hora del almuerzo únicamente para comer helado. Aunque a veces debía esperar por horas, e incluso había ocasiones donde él no conseguía salir y mis esperas eran inútiles. En esos casos yo me distraía por el centro comercial para finalmente rendirme e ir por un helado para mi mismo.
Me gustaba hablar con él; independientemente de ser increíblemente lindo, sentía que me entendía y... No sé, confiarle mi vida debió ser un gran paso cuando sentí que era el indicado.
El indicado para ser un gran amigo, y quien sabe. A pesar de no sentir sentimiento alguno por él, tal vez podríamos ser algo más. De todas formas, sé que no me era indiferente.
No tenía nada que perder
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
