❛.─𝐆𝐞𝐧𝐬𝐡𝐢𝐧 𝐈𝐦𝐩𝐚𝐜𝐭 𝐎𝐧𝐞𝐬𝐡𝐨𝐭/𝑳𝒆𝒎𝒐𝒏─.❜

─ 𝐀𝐞𝐭𝐡𝐞𝐫.

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✦ -"La primera persona que logra hacerte llegar a aquel lugar de placer por primera vez, ¿nunca se olvida verdad?"-✦

Sus caderas chocaban sucesivamente contra mi tracero provocado sonidos que abrumaba el ambiente, pero aun asi exitantes para los dos. Esto estaba mal, el joven de cabellos rubios era alguien nómada, nunca se quedaba a vivir en un solo lugar, siempre estaba de aqui a alla con misiones, mismo podría quedarse tranquilamente a vivir un año en otro pueblo.

Su ser era libre, y tenia su propósito bien puesto, y un simple amorío no lo haría cambiar de parecer, aun que le duela era una noche de pasión y ya, el mismo le advirtió al joven delante de él que se iría en la mañana, que tarde o temprano moriria en alguna de sus misiones, y que por ende nunca lo espere.
Que no piense en el cuando no estaba.
Simplemente no.

Aunque Aether se moria de ganas por quedarse debía buscar a su hermana, debía encontrarla, pero joder estar entrando y saliendo de su cuerpo y la lujuria no le dejaba poder pensar claramente.

¿Hace cuando ya que estaban cojiendo?

Exactamente eso no le importaba ahora, solo se concentraba en agarrar bien las caderas del contrario con tal precisión de dejar marcados sus dedos, se concentraba en como el interior de su acompañante suprimia y apretaba su polla. El sentir aquella calidez y suavidad que le permitian encerrar a su pene como si lo estubiera extrangulando hasta que quede sin aire.

Mientras caia nuevamente en la lujuria y calentura subiendo sus estocadas y ritmo, cada vez quería más.
¿Que más quería?, se llevo lo más preciado que ni con mil moras de intercambio valdría la pena, Su virginidad.

(...) le entrego su virginidad a Aether.
A pesar de saber que Aether de un día a otro podía morir, de un día a otro podría simplemente desaparecer, pero el sabía que aether fue su primer "Hombre" por decirlo de alguna manera, Aunque el pobre chico de cabellos dorados se negó rotundamente por sus cuestiones ya mencionadas, Terminó callendo en el juego de el diablo y ahi se encontraban ambos.

En una biblioteca cojiendo, mientras tenía a total merced el cuerpo que siempre quiso, el cuerpo con el que tenia magníficos sueños humedos y el cual tambien tenia excelentes fantasías eroticas.
Pero por ahí decían que los callados eran los más tranquilos, Pero este, este no se callaba por nada, en el lugar que estaban se retumbaba los gemidos del rubio porque el azabache menor tenia tanta vergüenza de que alguien los encontrara en esa posición que prefería taparse la boca ahogando sus gemidos, pero todo cambio en cuanto el rubio subió sus estocadas.

Duras, fuertes y profundas, claro que lo hacia apropósito, su lado Dominante salió a la luz tomando el control de la situación, una de sus manos que tenia en las caderas de (...) se coloco en el cabello de este, estirándolo un poco brusco, generando así que la cadera del pequeño azabache se encorbará para poder entrar más profundo y que lo mirara al menos por encima del hombro, aquella mano con guantes negros salió de los cabellos oscuros del chico para posarse en su cuello.