El Ivy

Capitulo 1

-Mierda no debí haber salido anoche.
¡Adivinen! Son las 5 de la mañana, he dormido 2 horas y dentro de 3 horas y media sale mi vuelo hacía la otra parte del mundo. Por suerte tenía hechas las maletas desde hace días. Me hicieron la fiesta de despedida de sorpresa.

La noche fue brutal,no invite a nadie. Me la organizaron a última hora y como estaba cerca de mi casa me pareció perfecto. El chico con el que tenía más o menos algo,quiso venir pero lo frené. Necesitaba tiempo alejada de él,solo sería un mes fuera y eso me daría tiempo para pensar en mí, en él, en todo.

-¡Estás loca! ¿Como vas a salir de fiesta el día antes de tu vuelo!- Nona,como siempre.

Mientras me arreglo vienen flashes a mi cabeza.
Me besé con una chica.
-¡Ay,madre! Joder,me besé con Melanie.-dije en voz baja

No me lo puedo creer. Ósea, si es cierto nos atraíamos,pero no quería ilusionarla. Soy una persona muy libre,y justo una relación no era lo que buscaba aparte todavía no sabía si yo era simplemente una pendeja flexible o alguien de la comunidad LGTBQ+

Terminé antes de tiempo todo y solo estaba esperando que mi tío me viniera a recoger junto con su amigo. El viaje era de unas 20h desde Marbella a Madrid y de ahí a República Dominicana. Aprovecharía para dormir todo el viaje.

Hice registro de mis maletas y para mi mala suerte a Nona,se le ocurre ponerme de acompañante de una señora,la madre de la abogada de familia. Mi abuela solía ponerme en situaciones que yo no sabía como manejar o no las decidía por mi.
Viaje con ella de Marbella a Madrid y en Madrid decidí separarme.

Cuando llegué al segundo avión,después de todo me tocó la lotería. Nadie tenía un asiento a mi lado y estaba justo enfrente del baño.

No podía tener tanta buena suerte,justo se sentó un señor bastante simpático pero yo no quería tener a nadie a mi lado.

Dormí bastante hasta que el señor me empezó a contar su vida,yo por ser simpática le seguí el rollo un par de horas.
Se fué a un nuevo asiento con un amigo que también viajaba y resultó tener el asueto libre así que se cambió. Seguí durmiendo hasta que faltar pocos minutos por aterrizar.

Aterrizando me puse a mascar chicle, la presión atmosférica me tapaba los oídos y en algún lado leí que eso era lo mejor para evitar el taponamiento.

Al llegar a mi islita,sentí el calor tremendo. Recogí las maletas pagándole a un una especie de botones para que me ayudará y caminé hacia la salida del aeropuerto.

Hacia tanto tiempo no veía a mi tía y mis primos.
Corrí a abrazarlos y sonreí,los había extrañado. La última vez que fuí fue hace unos años,por el entierro de mi padre. Siempre había ido por motivo de fallecimiento (me quedaba par de meses como mucho)pero siempre regresaba al poco tiempo.

Subimos al coche y llegamos a la casa donde me críe una parte de mi infancia.
Se sentía hermoso estar ahí. Aunque algo me revolvía el estómago,tenía la extraña sensación de querer salir corriendo.

-¡Lara, estás tan grande! Llora mi tía.
-¿Tienes agua?
-Si,ya te la traigo.

Tome agua,cenamos algo y vinieron más personas a visitarme que me conocían desde que era una niña.
Primas,amigos,etc...

Después de hablar un rato,me acosté a dormir en la habitación que prepararon para mi. Tenía su baño propio y un jacuzzi. Si, mi abuela tiene dinero. Esa es su casa,ahí vivieron todos los hermanos de mi madre.

Dormí lo que parece ser un buen rato y de repente me despierto.
Me siento observada pero no hay nadie.
Tengo los ojos entre abiertos y siento como si me acariciaran la mano con suavidad,pero no había nadie en la habitación.
Me muevo y me quedo sentada.
¡Corre!- pienso,pero decido actuar con calma y autoridad. Sea lo que sea,yo estoy protegida.

Me asusté un poco pero decidí levantarme ya que ya casi amanecía.

Soy una chica muy sensible y para los que no sabían poseo distintos dones. En mi familia se trabaja la hechizería y yo sabiendo lo bruja que soy,decidí alejarme de ese camino.
Quizá por miedo,quizá por rebeldía,quizá por respeto a mis creencias,no lo sé ya.
Pero el caso es que se,veo y percibo más que alguien que no tiene sus sentidos desarrollados y eso todos en mi casa lo saben.
Mis tías se burlan de mi diciendo que soy más bruja que mi abuela,que es una mujer que ha trabajado en la hechizería más de 3 décadas.

Enfín,mucha mierda rara que no va conmigo... O eso creía yo.

Me levanto,fumo un cigarrillo francés a escondidas que pase por una de mis maletas. Como es legal aproveche y compre tabaco de liar y lo metí.

Pésimo hábito,pero tampoco me considero adicta.

Me encuentro en la galería,está cambiada y preciosa la casa.
Es grande la galería y hay una hamaca. Se ve todo el barrio por el balcón.
Suenan los gallos y los pajaritos cantan.
El aire se siente limpio. No recordaba la maravilla de esto.

Pasa un rato y me acuesto en el sofá de la galería,todavía tengo sueño.
Duermo una hora más y me levanto.
Mi tía sale a la galería con dos tazas de café en la mano y me da un taza a mi.
-Delicioso,gracias- sonrió y me devuelve la sonrisa

Charlamos un poco y decido empezar mi día. Transcurre tranquilo y con momentos muy divertidos, me sigue visitando gente y vuelvo a dormir en esa habitación.

Pasan los días y por alguna razón me siento más libre y mucho más tranquila.

En el fondo de mi alma sabía que algo iba a morir y algo que nunca sentí iba a brotar de mí.