Mañana es el primer día de clases, significa que hoy el último en vacaciones.
Había preparado todo ya a la mañana, solo estaba en mi cuarto jugando con Tintin, mi gatito pequeño, esperando a que llegue la pizza que papá John había ordenado.
Estaba acariciando a Tin con los ojos cerrados hasta que mi celular vibró. Perezosamente, lo tomé y lo desbloqueé.
Me había llegado un whatsapp de alguien, lo primero que hice antes de contestar, fue ver su foto.
Era, espera, ¿cómo se llamaba? uhm, ¿Thomas? si, creo que su segubdo nombre era así Su priner nombre es raro. Ya que.
Calum: Hola Evaaaaa
¿cómo sabía mi número? no recuerdo habérselo dado.
Yo: alohaaaa thomas¿?
¿cómo sabía mi número? no recuerdo habérselo dado.
Calum: Calum* mi mamá me dice thomas cuando esta enojada, quE HACÍAAAS
Qué
Yo: evita suena feo, dime, no lo sÉ , EVA QUIZÁ estoy esperando a que llegue una pizza. ¿como conseguiste mi número, negro kalun?
Calum: Ok no soy negro soy morocho, yo también quiero pizza como no me invitaste que mala amiga eres
Yo: recién comenzamos a hablar
Yo: no somos amiguis
Yo: eres un extraño seguro me vas a violar bai
Reí al enviar el último mensaje y bloqueé el móvil porque papá 1 y 2 me habían gritado para que baje a cenar.
-Esto es muuuuuuuuy rico.-Dije imitando al chico de un programa de tv.
-Lo sé-Me dijo papá John y yo solo reí.
Me comí tres porciones de pizza y me levanté para ir al baño. Me dí una ducha rápida y me lave los dientes.
Acomodé mi cama para irne a dormir y me puse ropa cómoda.
Estuve como media hora pensando en el otro día, volvería a ver a todos esos idiotas, olvidándome completamente que tenía que ver si Thomas me había contestado.
***
Gracias a Dios iba a una secundaria con doble turno.
Volví a mi casa con el uniforme de gimnasia que era una nusculosa amarilla, un short negro y zapatillas deportivas.
Corrí hasta el baño, me quite la ropa y me metí para darme un baño.
No había estado con nadie ese día, crucé algunas palabras con mis compañeras o profesores, pero esas tres primeras horas no había estado con nadie fijamente.
Salí de la ducha con una toalla envuelta en ni cuerpo y tome de mi armario un mini-short para dormir y una remera de hombre blanca. Y no era de nadie en especial, la había comprado yo para mi, en un talle grande ya que es muy cómodo para dornir, me puse un par de medias y ajusté la alarma para que suene dentro de una hora y media. Apenas me había acostado, y ya me había caído en un profundo sueño.
