Cap. 16

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La hora de salida llegó más lento de lo que me pude querer e imaginar, con alumnos e incluso maestros dandome miradas y murmurando a mis espaldas mientras pasaba, no pude pensar mucho en clases.

Estaba tranquilamente leyendo un libro unos quince minutos antes de poder irme con mi hermano, estaba sentada en una de las bancas interiores de la biblioteca, cuando vuelvo a escuchar unos murmullos.

-¿Pero estás completamente segura de eso? - murmuró un chico.

- Lo juro, eso fue lo que me dijo Miguel. Que ella le había faltado el respeto al futuro Alfa Ashton - le respondió la chica de la misma forma.

<<¿Por qué no se consiguen una vida y se dejan de meter en problemas que no son de ellos?>> Pensé.

Suspiré con cansancio.

-¿Si saben que los escucho, cierto?- dije para el grupo de chicos unos cursos más abajo que el mío, los cuales llevaban unos diez minutos mirándome y murmurando cosas a un volumen lo suficientemente alto como para que llegara a escuchar.

Ellos simplemente ignoraron mi comentario y siguieron murmurando, a excepción de una chica, la cual enrojeció por la vergüenza y salió prácticamente corriendo.

Rodé los ojos y salí de ahí.

Caminé un poco entre los pasillos, y como era normal el día de hoy, recibí miradas confusas de parte de la mayoría de estudiantes.

Salí a la puerta delantera y esperé a mi hermano recargada en la pared más cercana. Habían pasado ya varios minutos y mi hermano no salía, de pronto recibí un mensaje.

~ Pulgosa ¿Dónde estás? ~

~ Esperándote baboso ~
Rodé los ojos

~ Primera lección, calentamiento ~

~ ¿Qué? ~

~ Correrás de regreso a casa, lo harás
si quieres que tú preciado libro de
un tal 'Ares Hidalgo' sobreviva ~

~ Te mataré si algo le pasa ~

~ Posdata, me llevé las llaves de tu auto,
buena suerte pulgosa :) ~

Maldije a mis interiores y empezé a correr en dirección a mí casa.

- Mataré a Lucas en cuanto llegue a casa ¡Traigo una puta falda! -murmuré con dificultad. <<¿Desde hace cuanto no corría? Apenas llevo muy poco y ya me quiero tirar al suelo y quejarme del dolor en mis piernas>>.

Di la vuelta en una esquina casi doblándome el tobillo, ésta calle estaba más concurrida que las anteriores así que corrí entre la gente con cuidado de no chocar con nadie.

- ¡Cuidado! ¡Quítese del camino! -Grité a un señor. Me miró desilusionado y luego se hizo a un lado.

-La juventud éstos días- lo oí suspirar al pasar por su lado.

No le di importancia y seguí corriendo empezando a sentir ese molesto ardor en los muslos y pantorrillas el cuál me indicaba, que mis músculos se estaban cansando.

- Ya casi llego -me alenté a mi misma viendo a lo lejos el complejo de casas en el cual se encontraba la mía.

Quité la vista de mi alrededor y me concentre tanto en el complejo de casas que ni siquiera ví cuando choque con una chica, haciendo que tirará las cosas que sostenía en sus manos.

YO!? HIJA DE LA LUNA!? [En Proceso y corrigiendo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora