Tercer turno: Fuerza desconocida.

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4 de enero... Parque central de Caracas, Área V.4.

—¿Hay alguien aquí?— preguntó levantando un arma, un hombre de origen venezolano.

(Mierda, si me encuentra me matará seguro.)

El hombre encapuchado con su arma cargada busco entre algunos arbustos sin encontrar nada.

—No hay nadie... Solo fue mi imaginación.

—¿Que estas hablando?— preguntó otro rebelde que estaba junto a el que apuntaba al aire.

—Nada, vámonos.

Los rebeldes se alejaron y saliron del parque.

—Aaaaaaaa, ¡que alivio! Pensé que moriría.— dijo Faith soltando un suspiro y salir del arbusto en donde estaba.

(Tengo que irme rápido esto se convertirá una zona de guerra y mejor no quedar atrapado en el fuego cruzado.)

Al salir del parque Faith escucha una pequeña explosión viniendo de lo que parecía una biblioteca y miró a un anciano atrapado en el humo y llamas que se hacían cada vez mas fuertes.

(Tsk, ya a comenzado... No puedo dejarlo allí, pero si me quedo tal vez no pueda escapar del fuego cruzado. ¡Ahhh! ¡Mierdaaa! Luego no voy a poder ver a la cara a Annya si no lo salvo...)

Faith entro al puesto donde estaba el anciano y lo logra sacar del mostrador, pero al intentar salir del puesto la salida se derrumba y quedan atrapados dentro del local que se llenaba cada vez mas de humo.

—Cuff, cuff.— Faith toce al inhalar humo y polvo de los escombros.

(Lo que faltaba, ahora estoy atrapado, con tal vez unos dos o tres minutos antes de que mis pulmones se llenen de humo y me desmaye. Eso sin tomar en cuenta el tiempo que dure la estructura antes de que colapse y se nos venga encima. Piensa, piensa... Debe haber algún lugar por donde salir.)

El chico peli rubio analizando la situación en la que estaba, comienza a buscar por donde podía salir sin encontrar nada.

(Nada... No hay por donde salir, estamos atrapados.)

—Cuff, cuff... Si hay alguien allí afuera, ¡que nos ayude!— tosiendo por el humo en sus pulmones Faith grita tratando de conseguir ayuda pero no obtiene respuesta.

(Tsk, nadie nos escuchara.)

Entonces un escombro cae encima de uno de los estantes que había allí, provocando que se caiga.

Faith se acerca hasta donde cayó el estante y mira en el suelo una pequeña compuerta.

(¡Si! Tal vez ese sea el sótano, no es una salida pero algo es algo.)

Abre la compuerta toma a el anciano que estaba desmayado y lo arrastra hasta la compuerta.

—Jaaa... Estúpido anciano deberías de ponerte a dieta. ¡Joder, cuanto pesa!

Al entrar en la compuerta y serrarla se escucha como se colapsa todo arriba.

Faith intenta abrir la compuerta nuevamente pero no puede por el peso que estaba en esta.

(Ahora si estamos atrapados.)

El joven se da cuenta de su situación y se voltea a ver en que lugar estaban, entonces queda asombrado con lo que sus ojos estaban mirando.

La habitación no era un sótano normal, estaba todo escuro pero se podían ver en las paredes unas especies de luces azules que se encendían y apagaban como si fuera un pulso humano y recorrían todo el lugar, eran como unas venas dentro de la pared.

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⏰ Última actualización: Jun 05, 2021 ⏰

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