DIA 8

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Hoy me desperté y estoy de nuevo en casa de Charlie, lo último que recuerdo era...mmm bueno no recordaba nada de lo que paso cuando me escape, pero estoy de regreso y me siento muy débil. Pocos minutos después mire la puerta abrirse era Charlie con su acogedor chocolate caliente, empezaba a amar ese chocolate.

Como te sientes? Me pregunto Charlie

Bien... respondí

Me alegra pequeña.... dijo

Pequeña?.... mis mejillas se pusieron rojas, no puede ser esto esta mal muuy mal, no podía enamorarme no de el ni de nadie. Como lo había dicho no quería lastimar ni que me lastimarán pero en el fondo lo hacía más por mi, por que se lo mucho que duele intentar clavar la espada del olvido.

El sonrió su sonrisa era ligera, acabe el chocolate y le di la taza y me tape para dormir como una señal de que se fuera las verdad nunca he sentido sueño.

El susurro...tan fría que cortas... y se fue abandonando el cuarto.

EL DIARIO DE UN ANGEL ROTODonde viven las historias. Descúbrelo ahora