Una Hermosa Coincidencia (Iniciando)

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Primero que todo :'D quedo debiendo el dibujo, posiblemente lo recompense mas adelante. Y POS ya es todo xd 

C A P I T U L O  1

Deja de comportarte como una niña

Como cada tarde a la misma hora, minutos antes de cada atardecer, una linda chica de cabellos dorados y bellos ojos celeste levemente apagados, miraba con atención el cielo esperando con ansias el cambió de día a noche.

Cuándo el sol comenzó a ocultarse detrás de las montañas, la desolada chica recostó su cuerpo de medio lado sobre el techo para evidenciar el atardecer de una forma más cómoda. Sus ojos se cerraron para, según ella, sentir las últimas energías positivas que dejaría sol en el día.

—¿De nuevo estas aquí arriba?, —cuestiono una pequeña voz robótica a las espaldas de la chica.

—shh, trato de relajarme. —hablo en un susurro lo suficientemente audible para que la consola que se había acercado, escuchara.

Bmo, su querido amigo, se había acomodado al lado de la cabeza de la rubia para acompañarla mientras presenciaban el atardecer. Un relajante silencio se hizo de nuevo presente en el techo de aquella casa y mientras ambos miraban aquel hermoso espectáculo natural en donde el cielo se tornaba de unos espectaculares tonos cálido, ambos pensaban en como la vida de Fionna había perdido muchos propósitos en tan poco tiempo y uno de sus propósitos más importantes, Cake, la gata con el don de estirarse, había sido el detonante de la repentina depresión en la rubia. El hecho de que Cake se marchara para así compartir tiempo con su "nueva familia" provoco que Fionna se derrumbara completamente, cosa que le preocupaba a la pequeña consola.

—Crees que este feliz ahora?, —cuestionó la heroína en un tono demasiado tranquilo y relajado, rompiendo primero el silencio.

Su amigo había evitado hablar del tema relacionado con la gata, pues sabia que la rubia aun no había aceptado ese cambio tan extremo y sentía una abrumadora soledad. Ambas chicas, gata y humana, habían discutido fuertemente semanas antes, Fionna al ser una mujer demasiado orgullosa, evito y evadió cualquier cosa que tuviera que ver con Cake; hasta las preguntas recurrentes del dulce príncipe o Marshall Lee sobre el tema.

—Fii... —Dirigió su mirada a la chica que esperaba su respuesta en silencio. —No lo se. —Contestó con franqueza.

—Fui una idiota con Cake, verdad? —por fin, levanto la mirada y se incorporó de tal manera que quedo sentada junto a la consola.

—¿Qué? No, para nada... Tú solo... —antes de que lograra terminara de hablar torpemente, tratando de que la rubia no se sintiera mal consigo misma, la voz de la chica lo detuvo y obligo a mirarla.

—No es necesario que trates de hacerme sentir bien, Bmo... —la suave brisa movía sus dorados cabellos permitiendo le a la consola una mejor vista de la inexpresiva mirada de la chica. Se diría que lo único que podía expresar esa inusual tristeza en la humana eran sus azules ojos que retenían las lágrimas que obligaban con salir. —Se que me comporte de una forma egoísta con ella... debí entender que Cake tiene otra familia, otras personas a quien dedicarles su tiempo. —Por su cabeza comenzaron a pasar fragmentos de la discusión de aquel día, del último día que había visto a su hermana.

•●•°Flash Back°•●•

Aquel día en la mañana, la rubia había despertado con un gran animo, la emoción que hacia parte de ella se notaba a metros y BMO podría asegurar que hace mucho no veía alegría rebosar en ella. Resulta que ese día en particular, saldría a una aventura junto a su hermana, aventura que llevaba tiempo prometiéndole que harían.  Hacia tiempo que la rubia quería compartir tiempo con la gata, pero en cada oportunidad ella se excusaba para estar con su familia, cosa que Fionna entendía a la perfección. Sus bebes no eran muy grandes, después de todo, aun eran cachorros dependientes a su madre y Cake debía estar al pendiente de ellos.