El Internado: Saint Mary

Cap 3

Desconocido

Al abrir esa puerta vi a la chica más importante de mi vida y no la quería de manera romántica, sino como una hermana para mí.

-Georgia Andrews- susurré al ver a mi mejor amiga de toda la vida frente a mi.

-Hola idiota- dijo entrando a la casa, dirigiéndose a el refrigerador tomando una cerveza para echarse un gran trago- ¿Como te ha ido con eso de ser malo y asesino?

- Pues...alguien no me ha traído víctimas- dije mirándola con indignación fingida a lo que ella río- pero bueno, fuera de eso necesito esconder unas cosas.

-Claro, ¿que tienes que hacer mi querido asesino?- dijo terminando su cerveza para luego acostarse en el sofá de al lado.

-Tuve unos cuantos problemas con el director de un psiquiátrico- dije restándole importancia- necesito acabar con el.

-Yo me encargo, le diré a Dominic que investigue un poco- dijo saliendo de la casa.

-Ey, Georgia- volteó a verme.- fue bueno verte tonta.

Unas horas luego de que Georgia se fuera decidí salir un rato a caminar.

Ser asesino conlleva muchas horas sin dormir y sin poder relajarse.

Luego de una hora y media caminando me topé a Dominic, un chico de ojos color miel, con un sentido del humor muy jodido, bastante inteligente pero pendejo.

El cual ahora mismo debería estar buscando al director, pero no, prefiere estar con un chico en un callejón.

-Dominic- dije poniendo un brazo en la pared, a lo que el se alejo del chico y volteó a mirar a la salida del callejón.

-Je-jefecito, hola, que extraño verlo por acá- dijo titubeando acercándose a mi- No se como llegué aquí- dijo riendo nerviosamente.

-Dominic por hoy te lo dejaré pasar- dije dándome la vuelta para irme.

-Nos vemos jefecito- dijo moviendo su mano en símbolo de despedida.

-Dominic- lo llamé a lo que el volteó asustado- súbete la cremallera y peínate, no seas tan obvio.

Camine sin dejarlo hablar, el me va a matar algún día de un coraje, no, no es cierto lo mataría primero, pero se que si lo hago su espíritu seria tan estúpidamente molesto como para atormentarme todo lo que tengo de vida.

Dominic

Siempre me han gustado las computadoras, mayormente porque se  descifrarlas muy bien, igual que a los chicos no porque los sepa descifrar sino porque me gustan.

Estaba listo para salir cuando Georgia llegó, supe que tenia un trabajo que hacer.

-Hola imbécil, el jefe tiene un trabajo para ti.- dijo entrando a mi apartamento sentándose en el sofá.

-Si Georgia estuve muy bien luego de que casi me matarán por tu culpa- la última parte lo dije ofendido falsamente.

-Ay ya cállate y haz tu trabajo- dijo sin mirarme.

-Por eso estas soltera por amargada- dije lo último dirigiéndome a la computadora.

Noté como me sacaba el dedo y le hice una mueca.

-¿Qué necesita el jefe ahora?- pregunté luego de sentarme.

-Director de un psiquiátrico.- dijo cortante.

-Pff, claro, ¡solo con eso puedo saber todo!, maldita puta barata del montón- dije arrastrando la palabra de barata con sarcasmo.

Se quedó callada por un momento, solo esperé el tremendo golpe que me daría.

-Solo haz tu trabajo Dominic, que te jodan- dijo pasándome un papel con el nombre del psiquiátrico.

-Solo si eres tú mi querida amargada.

Internado Saint Mary

Busqué en la computadora, aparecieron muchos resultados.

Pacientes >
Instalaciones >
Logros>
Directiva y administración>

Di doble click en la directiva y apareció un viejo con traje haciéndose el importante.

Para ese entonces ya Georgia estaba abriendo la puerta para irse.

-Se rápido- dijo antes de cerrar la puerta duramente.

Decidí salir a dar un paseo, después de todo, el jefe no se daría cuenta.