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Y si, Jeon Jungkook ya se había acostumbrado a vivir así.

-¿Puedo ir a la biblioteca?

-No, aquí tienes una, más grande que las de todo Seúl.

Para todo siempre era un rotundo "NO" por parte de sus padres, ellos siempre lo protegen de más.

-Iré a la biblioteca, después iré a cenar.

-Excelente –su padre siguió viendo el periódico en aquella grande y solitaria sala– Es cierto, este fin de semana toda la familia viene a una cena, debes recordar que no debes dormir tarde.

-Eso lo sé, si me disculpas iré a la biblioteca –Jungkook subió al segundo piso, aburrido se dirigió a su habitación– Oh Jeon Jungkook, te espera una gran noche de tristeza y soledad –se dijo a sí mismo, y si es lo que él siempre hace–

Desde que tiene memoria Jungkook nunca ha escuchado a sus padres aceptar algo por parte de él, recuerda perfectamente todas esas veces en donde esos "no" lo hicieron sentir tan infeliz y desilusionado.

¿Algún día podré ser feliz? ¿O será hasta que mis padres mueran?

Esas palabras resonaban en su mente al punto de quedar profundamente dormido.

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-Buenos días cariño, es hora de despertar.

Jungkook despertó, un poco adormilado se dignó a preguntarle a su madre algo.

-¿Madre cuando podré salir y tener una vida cómo los de mi edad?

-Jeon cielo, deja de decir ese tipo de cosas además aquí en casa tienes absoluta... –Jeon la había interrumpido–

-No tengo amigos, nunca he salido de casa, ustedes siempre están en sus viajes de negocios, siempre he estado solo, sinceramente no creo tener nada.

-Es mejor que no vuelvas a preguntar eso, ahora bañate, cambiate y baja a desayunar –su madre salió muy molesta, ella no dejaría que su preciado pequeño saliera al mundo-

-¿Debería enfrentar a mis padres en el desayuno? –Jungkook se encontraba abriendo las llaves de la regadera mientras hablaba solo– creo que sería un avance, podrían ver que su hijo está lleno de valor y se puede cuidar por sí solo.

Jungkook estaba desayunando, esperando el momento indicado.

-Jeon cielo, te quedarás solo por tres días, tu padres y yo tenemos unos negocios que arreglar en Londres –Jungkook asintió mientras veía su comida–

-Hijo quiero que no hagas nada malo –su padre había mencionado en un tono un poco serio–

-Oh si, como si siempre hiciera cosas malas, soy su hijo ¿cuándo les he fallado? ¿qué es lo malo que según ustedes yo haría? –estaba dispuesto a soltar todo si ellos decían otra cosa, pero no sucedió sus padres sólo lo ignoraron– excelente lo mismo de siempre, saben iré a mi cuarto.

-Jeon cielo, ya nos vamos –gritó la señora Jeon desde la sala–

Jungkook salió de su baño y desde su cuarto gritó con un "si", dicho esto sus padres salieron.

-¿Y ahora que haremos? –le dijo a su mariposa– ¿debería escapar de casa? –Xixi se encontraba en el escritorio- oh vamos, la respuesta que me digas te haré caso –movió una ala, dando a entender a Jungkook que si debería escapar– mmm supongo que tu repuesta siempre será la misma, no lo sé –la mariposa voló a la ventana– no te enojes entiende es difícil –Jungkook fue con ella y le abrió la ventana– nos vemos luego o al menos hasta que se te olvide que estás enojada conmigo –sin más Xixi salió de su cuarto, dejándolo solo–

-Bueno serán unos días largos y solitarios –salió de su habitación para ir a su "salón" ahí tiene clases con sus maestros, los mejores de todo Corea y el extranjero, sin duda sus padres querían que Jungkook tuviera un buen estudio–

NO [taekook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora