•Cuando El Sol Se Pone•. [049x035]

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Entonces ambos entes viajaron a través de las bellas tierras tratando de mantener la relación tranquila, pues aveces si que tenían sus altibajos como una buena amistad aunque la palabra doliera...
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Viaje tras viaje ambos se conocían cada vez mejor, por su parte Dio que le contaba sus hazañas en tiempos de dioses griegos, hazañas que dejaban al médico siempre atento, a decir verdad era bastante agradable que alguien te escuchará después de tanto tiempo en soledad y más si no creía que estabas maldiciendo lo cierto?.

Con el tiempo comenzó a tenerle más confianza al extraño artefacto, tanto así que tal vez comenzaba a considerarlo más un amigo con el cual hablar antes de dormir, hasta que...

—Si te lo digo de verdad que no pasa nada, no tiene nada de malo.
No recuerdas la última vez que te paso a ti? No fue tan malo cierto?—

Resonó en la cabeza del doctor mientras caminaba con una mueca de desagrado en el rostro, tenía la cabeza pero que le explotaba de estar escuchando tanto hablar del tema a Dio pero no exactamente por solo escuchar pues el problema era que tenía casi una semana ignorando lo completamente, desde la primera vez que le propuso hacer esa atrocidad como pensaba el Doc.

—No puedes seguir ignorándome por favor...—

—...—
Pero no obtuvo respuesta de el.

—Por lo menos dime algo, extraño tu voz un poco además hace tiempo que no me sacas a respirar un rato al aire libre—

Tal vez fue por el tono que uso o por el hecho de que tal vez apreciaba al individuo un poco más fuera del compañerismo pero con esas dos primeras líneas lo convenció.

—Por favor deja de insistir, no voy a dejar que pongas en riesgo a un inocente por favor—

—En serio estoy escuchando tu voz?—

Pero antes de que pudiera continuar con la insistencia la voz del joven lo interrumpió con un tono que claramente exigía que guardara silencio.

—Dionisio...—