Juntos.

II

Al llegar a la escuela sentía un vacío en el pecho, no quería estar allí, no quería caminar por esos pasillos que me traían tantos recuerdos que me quemaban internamente, no quería pasar por el viejo casillero de Nick y verlo lleno de cartas y flores, porque, por muy hermoso y conmovedor que parezca, para mi es otra de las tantas cosas que me recuerdan que él ya no está, que se fue y que nunca va a volver. Pensaran que me aferro mucho a él y que no soy capaz de superar su muerte, pero, lo he intentado y nada da resultado, siempre vuelto a estar sentada en los pies de mi cama, llorando mares, con una botella de alcohol en la mano y sufriendo como aquel día que me desperté sabiendo que mi mejor amigo no estaba. Ya no quería sentir ese dolor, pero era prácticamente imposible deshacerme de él, lo único que podía hacer era aparentar estar mejor, aunque todos sepan que no es así, era justamente lo que tenía que hacer en este momento.

Empezaban las clases, algunos de los chicos de mi clase me saludaron y me preguntaron cómo estaba, y por costumbre respondía que estaba bien, me senté en medio del salón y me dispuse a esperar a que el profesor llegara, el cual no se tomó mucho tiempo

-Buenos días, queridos estudiantes, soy el profesor, Finnigan, y soy su nuevo profesor de literatura- Dijo en un toco alegre, mientras copiaba su nombre en el pizarrón, era un hombre joven, no pasaba de los 40, moreno, y tenía un aire de tranquilidad y alegría -Bueno, para empezar a conocerlos prepare un proyecto, que sé que les gustará, siempre trato de buscar proyectos que les agraden y que les hagan querer estar y participar en mi clase, al fin y al cabo ustedes son los que están aprendiendo y que mejor que hacelo con algo que disfruten, así que como primer proyecto se harán en parejas e irán a su lugar favorito en todo el pueblo y en un ensayo nos relataran porque es su lugar favorito, el punto aquí es que se expresen, descubran por qué este lugar es tan importante para ustedes y que lo compartan con su compañero, en el caso de que tengan un lugar distinto irán a los dos lugares

Un chico alzó su mano para hablar y el profesor le se dio a palabra -¿Nosotros podemos escoger nuestra pareja?

-No, por lo que se, la mayoría se conoce desde sexto grado, y sé que no todos se llevan con todos, pero esto puede hacer que conozcan mejor a aquella persona a la que no le hablaban y tal vez les hagan cambiar su perspectiva sobre esa persona. Así que las parejas las formaré en orden de lista, y por ahí derecho tomare asistencia. Deberán entregármelo el lunes de la próxima semana.

Algunos chicos se miraban deprimente con quienes se pensaban hacer, otros estaban tranquilos porque sabía que tenías cerca en la lista a sus amigos; mientras tanto el profesor buscaba la planilla en su bolso, cuando la encontró empezó a llamar a lista y indicar cuáles eran las parejas

-¿Sophia Beckham?

-Presente

-¿Alejandro Cárter?

-Presente

-Bueno, ustedes serán pareja- indicó el profesor, asentí y me gire para ver a Alex, su rostro era un poco más expresivo de lo normal, tenía las comisuras de los labio levemente levantadas, algo rato en su comportamiento conmigo, usualmente solía ser frío y se notaba, por un momento sus ojos se encontraron con los míos y luego apartó la mirada, casi siempre trataba de estar el mayor tiempo lejos de mí, me hablaba lo necesario, como un saludo o una que otra frase pero no más que eso, me extrañaba que se portase así, por un tiempo pensé que era por lo que consumía, pero dejó de convencerme eso, es como si lo único que nos uniese era Nick.

La clase acabó y todo mundo empezó a marcharse a su siguiente clase, tomé mis cosas y fui a mi casillero para cambiar mis libros por los de la clase siguiente

-Ahg, tenía que estar mi hermanito entre nosotras, hubiéramos ido al viejo parque al que íbamos después de clases- gruñó Melissa en un tono frustrado recostado su cabeza en el casillero junto al mío -Recuerdas, habías acabado de llegar al pueblo y solíamos comprar un helado y nos sentábamos en los columpios y hablábamos hasta que se nos terminaba el helado y volvíamos a casa

-Si me acuerdo, pero no necesitamos un proyecto para ir de nuevo, podemos hacerlo un día de estos -Dije mientras cerraba mi casillero y me apoyaba en el mirando a Mel

-Si, podemos hacer un picnic, así como en los trents de Instagram

-Claro- le di una sonrisa con los labios juntos y ella me la devolvió

-¿Que clase tienes?- pregunto

-Historia ¿Y tú?

-Química- se reincorporo e hizo una mueca de cansancio -¿Me prestas una liga?

-Si- Saque una de las que tenía en la muñeca y se la preste

-Gracias, espero que allá un cabello tuyo en ella

-¿Me vas a clonar en clase? Solo asegúrate de que no sea un yo malvado

-Oh, créeme no hay alguien más malvado que tú, y no, no te clonare, si queda algún cabello pelirrojo tuyo por ahí y se queda en mi cabello diré que tengo visos rojos- reímos por un momento, mire la hora en mi teléfono y Dios iba a llegar tarde

-Bueno llegaremos tarde, adiós -dije rápidamente, le di un beso en la mejilla y a paso rápido me encaminé a mi siguiente clase

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Después de clase me desvié un poco del camino a casa, me dirigí al que considero mi lugar favorito en el pueblo, de camino a aquel lugar me cuestionaba si escoger este lugar para el proyecto de literatura, no lo pensaba por Alex, ya que el también conoce este lugar, y creo que el porque es mi lugar favorito es muy obvio, pero, el tener que compartir con toda la clase el significado que tiene para mí, es algo muy distinto. Al llegar dejé mi bolso en el suelo y me senté junto al rio, el lugar quedaba en el bosque a las afueras del pueblo, me lo había mostrado Nick hace 3 años cuando nos volvimos amigos, Ale, Nick y yo, solíamos sentarnos a la orilla del pequeño rio y hablar por horas, Nick siempre nos hacia reír con sus ocurrencias locas.

Solté una risa amarga al recordarlo, su presencia se notaba más aquí

-Hoy fue el primer día de clase- le dije, mi voz salía áspera y mis ojos se cristalizaban -Estuvo tranquilo, aunque siempre haces falta tú, seguro hubieras echo reír al profesor nuevo, también le hubieras peleado para que nos dejara hacernos de a tres

Y aquí vienen las lagrimas

-Tu deberías estar aquí, Nick-Sollocé, mis lagrimas caían continuamente al césped, si seguía allí me iba terminarde destruir, me levante, tome mi bolso y con la manga de mi suéter me limpie lasmejillas y mire el rio -No sabes cuanto deseo a ver sido yo- dije en unsusurro, me di la vuelta y me fui.