Bakugo, Tu y Kirishima

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El rubio me besaba con pasión, no dejaba de tocar mi cuerpo, no queria perder el tiempo.
Se puso sobre mi, escondiendo su rostro en mi cuello, me deje llevar y comence a desabrocharle la camisa, él hizo lo mismo conmigo, las ropas caian al suelo, solo la ropa interior cubria nuestros cuerpos.

Sus labios deboraban mi piel como un juego sus manos iban cambiando de posición, primero tomandome el rostro, luego abrazándome mientras me besaba con tanta fuerza que me cortabas la respiración, sus manos, ahora las tenías sobre mis pechos apretándolos y de un momento a otro, subio mi sostén, fue ahi cuando note mis pezones mojados con su lengua que había empezado hacer de las suyas, mi respiración al igual que la de él estaba aceleradas.
Me tomo de la muñeca e hizo que me sentara frente a él, me abrazo para quitar por completo mi sostén mientras mordia mi hombro.
Mis brazos rodeaban su cuello, el calor de mi cuerpo era incontrolable, la erección de Bakugo se hacia notar en su ropa interior, puso una pausa al roce de nuestros cuerpos y quedo totalmente desnudo ante mi.

Me giro, poniendo mis manos sobre el colchón y los pies en el suelo, recorrio mi espalda con sus dedos. Llego a mi trasero y lo presiono. Tomo su erección y la coloco en mi entrada que estaba totalmente estimulada por la secuencia anterior pero antes de comenzar con los movimientos se acerco a su mochila y busco en uno de los bolsillos, la protección, una vez listo, todo comenzó.

Bakugo: Me encanta tu cuerpo.

T/N: Vamos, rubio, comienza.

Este sonrio y los movimientos dieron inicio, el placer era increible, me sentia tan bien y él parecia disfrutarlo.
Luego de unos cuantos minutos, él llego al climax pero yo aun no podia llegar, asi que este saco su miembro, me giro y me empujo a la cama, cuando logre acomodarme su rostro habia desaparecido entre mis piernas, tocaba lentamente el clítoris, estaba tan estimulada que cualquier movimiento me haria enloquecer.
Comenzo a lamer sin parar, cada roce de su lengua era maravilloso, senti algo diferente en la zona y me di cuenta que habia metido sus dedos en mi. Más y más rápido los movia, mis manos se enredaron en su cabello presionandolo contra mi intimidad.

T/N: Rubio...no puedo...más.

La frase finalizó con mi cuerpo llegando al orgasmo, este sonrio cuando me vio sonrojada y extasiada por el momento que habiamos tenido.
Me acomode en la cama y él se puso junto a mi, cubriendome con su camisa.

T/N: Por qué solo conmigo te muestras asi?

Bakugo: Asi cómo?

T/N: Amable, tranquilo y nada griton.

Sonrei con esa última palabra, él me miro, dibujo una pequeña sonrisa y respondió.

Bakugo: Porque me gustas. Y quiero mostrarte lo bueno que tengo.

Me quede sin palabras, a pesar de ser celoso y enojon tenía un lado tierno y sensible y eso me gustaba...un poco.
Me levante, me puse ropa cómoda y me dirigi a la puerta de mi habitación, me detuve, lo mire

T/N: Quieres quedarte a merendar?

Este accedio asi que baje y fui a la cocina a preparar todo mientras lo esperaba, hablaba con Mina por mensajes.

Mina: QUEE?!?!?! Aprovecho que te deje sola.
T: Algo asi pero es mi vecino, tendriamos que si o si caminar juntos.
M: Pero no necesitaba hacer lo que hizo 😂😂
T: 😌😌
M: Quién diria que es un pervertido!

Deje de responder los mensajes cuando escuche el crujir de las escaleras, me ayudo a acomodar la mesa para sentarnos y merendar.
Hablamos de tonterías, de la escuela y de nuestros planes como futuros héroes.
Cuando encendi el televisor habia una noticia de un grupo de villanos que habia sido detenido por All Might, el rostro de Bakugo se iluminaba cuando él aparecia.
Se sento un poco más cerca de mi para rodear mi cintura con su brazo, se acercaba para besarme pero antes de que pudiera hacerlo, el timbre sonó.
Me puse de pie y fui a la puerta.

NARRA BAKUGO

Maldita sea, quien interrumpe?? O quizás son sus padres??

Me puse de pie y me acerque para escuchar mejor, mi humor cambio por completo cuando escuche su voz.
Sali del living, me acerque a la puerta y solte enojado.

Bakugo: Qué haces aqui Kirishima?

El pelirojo me miraba sorprendido y no contestaba, lo cual me hacia enojar.