El rostro detrás de la máscara✅

CAPÍTULO 11

No atendí a ninguna materia por estar pensando en cual profesor puede ser. ¿Cual iría a un burdel? Todos están casados. Es que tiene que ser hombre porque una mujer no iría a un burdel a ver a otra mujer a menos que ahí baile. No no ya me estoy imaginando muchas cosas y a este paso la cabeza me estallaría. Al fin sonó el timbre de que había terminado la tercera materia que habíamos dado. Perseguí rápidamente a Lucía.  Yo sé que ella me necesita más que nunca. Y aunque sea totalmente idiota de mi parte quise preguntarle cómo se siente pero ella habló primero.

—Quiero saber quién es y cuando lo sepa lo voy a matar con mis propias manos—la rabia era bastante clara en su voz ni siquiera me miraba a la cara iba mirando solo al frente.

—A ver Luci mi niña lo vamos encontrar aparte ya tengo un avance en sospechas no es mucho pero algo es algo y si lo quieres matar pues lo matamos y ya—ok no debí decir eso.

—Perfecto. Pues a ver dime que sospechas—y decidió mirarme

—Bueno mira para el hacker saber que bailas en un burdel tiene que ser mayor de edad porque sabes que allí no pueden asistir menores y pues ningún alumno tiene 18 así que es un profesor—ella me miraba muy atenta—y también debe ser hombre porque no puede ser una mujer que vaya a ver a otra a no ser que baile y según dices no baila ninguna mujer que conozcamos de la escuela muy aparte en el vídeo donde habló el hacker en sus manos se veía que eran de hombre—terminé de decirle y vi como ella se quedó parada como asimilando todo, tomó una profunda respiración y siguió hablando.

—Bueno mira tenemos de opciones a Ulises el profesor de matemáticas que es bastante joven y tiene cara de perverso—decía ella mientras yo la escuchaba con atención—también tenemos a Manuel que es el profesor de Artes que tiene muuuuucho mucho dinero y se da todos los lujos quien dice que no puede ir a un burdel a mirar mi hermoso cuerpo—reía y yo también comencé a reír porque por lo menos se toma el tiempo de hacer bromas—tenemos a Álex el profe de deportes que es súper inteligente y tranquilo,mmm sospechoso—yo reía por la forma en que Lucía lo decía.

—Lucii se te olvidan dos personas más—ella me miró con rareza

—No,no falta nadie ¿Quienes faltan?

—Jeff,que aunque sea tu preferido siempre me ha parecido muy sospechoso como siempre habla del hacker como si no tuviera miedo de nada como si no entendiera que una persona entró al sistema del colegio que es prácticamente imposible ya que Jeff es el que más sabe de informática y casi nadie lo supera pues por eso me parece muy sospechoso—dije con firmeza

—Bueno es cierto en estos momentos no creo en profesor favorito—me sorprende que lo acepte—y bueno ¿quién es el otro?

—El director,de él no se no tengo muchas sospechas pues es felizmente casado y se ve demasiado preocupado con este asunto pero hay que mencionarlo—es cierto de él no sospecho tanto.

—Si cierto a ver ¿quienes son los menos sopechosos?—preguntaba Lucii

—Álex y el director son los menos sospechosos osea ellos no deben ser

—Bueno concentrémonos más en los otros pero no nos olvidemos de ellos dos—se le notaban las ganas de encontrar al hacker.

—Ok Lucii—le di una sonrisa la cual me devolvió.

Después pasó un tiempo y nos fuimos cada cual a su casa cuando llegué estaba mi madre tan contenta como siempre y muy distraída que eso es lo raro estaba tan distraída que ni noto cuando llegué. Subí a mi habitación y decidí darme un baño.

—ACELERAS TO MIS LATIDOOOOS ES QUE ME GUSTA TODO DE TIII—cantaba mientras me bañaba pues amo hacer eso siento que se me hace mejor la ducha. Sentí que mi madre me llamaba así que pare la música.

—Cristina hija mía tienes que dejar esa bulla por Dios que me quedo sin garganta—como siempre mi madre exagerando

—Mami siempre me ducho cantando pero bueno dime qué pasa

—Cuando te termines de duchar ponte un vestido bastante lindo que tenemos visita—¿Quiénes serían?—Ya esta noche llegan nuestros familiares que estábamos esperando—la poca alegría que tenía cantando se me esfumó en un momento y con ella se fue mi madre también.

Hice lo que mi madre me ordenó me puse un vestido negro bastante elegante para la cena “familiar” de hoy. Estaba nerviosa y esos nervios aumentaron cuando sentí que sonó el timbre. Oh no ya estaban aquí. Pero para mi sorpresa mi madre me llamó a que bajara que era Lucía la que estaba llamando a la puerta.

—Hola Luci ¿Que haces aquí a estas horas?—me pareció extraño

—Es que voy para el burdel—murmuró—y venía a decirte que estaré atenta a cualquier cliente que vaya y por cierto ¿Por qué tanta elegancia Cristina?

—Es que hoy llegan algunos familiares nuestros—dijo mi madre interrumpiendome y como para mi mala suerte en ese momento sonó el timbre de nuevo y esta vez sí eran ellos.

Ahí estaban ellos muy elegantes. La tía Felicia con un vestido negro casi igual al mío y un moño  que la hacia ver hermosa.  El primo Tomás estaba de traje y se veía guapo la verdad y pues mi primita Patricia se veía como toda una princesa con ese vestido y su cabello suelto.

—CRIIIIIISSSSSSS—vino Patricia a abrazarme

—¿Cris? No que no se conocían—dijo Lucía y ahí fue que me di cuenta que a todos les decía que no conocía a mi familia y es cierto no los conozco solo a éstos pero igual tienen que pensar que no.

—Emm Lucii pues no,no los conozco pero con la tía Felicia hice algunas videollamadas y desde ahí veía a Patricia mi primita y pues parece que me quiere mucho—respondí muy nerviosa.

—Pues sí y parece que tú también la quieres mucho a ella—me miraba fijamente—pero bueno no es mi lío así que ya me voy—nos despedimos y se fue.

—¿Por qué están aquí?—les pregunté firmente a mi familia y un silencio incómodo reinó la casa.