Día 28

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Un nuevo día comenzaba para el matrimonio Lan-Jiang, ese día les tocaba hacer de niñeros de su sobrino menor ya que sus hermanos debían realizar un viaje fuera de la ciudad y no volverían hasta bien entrada la noche, para el joven de ojos violeta era una mala mañana debido a que el tratamiento nuevo le producía fuertes dolores tanto en la cabeza como en el vientre pero aun así y pesar de las protestas de su esposo fue con el a buscar a su sobrino

Wei Wuxian-. gracias por cuidar de mi rabanito, si no fuera porque es una urgencia sabes que jamás les pediríamos algo así, pero mamá y papá están ocupados y Shijie también junto al pavo real

Lan Zhan: hm...

Jiang Cheng: ya te dije que nunca seria un problema idiota

mientras ambos hermanos Lan hablaban entre ellos los Jiang iban por el pequeño quien estaba jugando con los conejos en el jardín, nada mas ver a su mamá y a su tío favorito corrió hacia ellos  a lo mas rápido que le permitían sus cortitas piernas, se abrazo a las piernas de su tío esperando a que este lo tomara en brazos

Jiang Cheng: pequeño mocoso cuantas veces te e dicho que no te cuelgues, te romperé tus piernitas si lo vuelves a hacer

Lan Sizhui: Tío Chem upa! upa!

lo tomo en brazos alzándolo por el aire y volviéndolo a sostener mientras le sacaba algunas carcajadas al menor, claro que aquello le provoco un fuerte dolor en el vientre que no paso desapercibido por su hermano quien al verlo tomo a su hijo y lo miro preocupado

Wei Wuxian: A-Cheng estas bien? A-Yuan te golpeo?

Jiang Cheng: no A-Xian, es el nuevo tratamiento, me causa unos dolores horribles pero estoy bien

luego de despedirse de la pareja montaron en el auto con el pequeño y algunas de sus cosas, ninguno iría a trabajar ese día así que tendrían toda una tarde de juegos con el pequeño rabanito como le decían de cariño, nada mas llegar a la casa el pequeño fue a ver televisión esperando a que sus tíos le dieran su merienda

Lan Xichen: A-Cheng te sientes bien? te veo un poco pálido

pregunto abrazando a su esposo, lo había notado mal nada mas despertar pero no quería ser muy entrometido ya que sabia que al contrario le preocupaba que ase preocuparan en exceso de su persona, cuando su amado loto asintió correspondiendo a su abrazo logro calmar la sensación asfixiante que tenia su corazón, le ordeno ir a sentarse con el pequeño y este acepto nada mas por calmar la angustia de su esposo, ambos estaban sentados viendo una tonta caricatura que era la favorita del menor y a modo de juego comenzaron a pedir su comida

Lan Xichen: ya voy mis reyes

se reía mientras preparaba la pequeña mesita con la merienda de los tres, pasaron toda la tarde riendo y jugando hasta que ya entrada la noche el pequeño niño se quedo dormido en los brazos de Xichen, cuando se estaba levantando para recostarlo llegaron sus hermanos así que tras darle las gracias mas de un millón de veces por cuidarlo al final quedo solo el matrimonio en la casa

Lan Xichen: estas muy cansado...?

pregunto mientras besaba su cuello con cariño y repartía pequeñas caricias por su vientre, el Jiang se mordió los labios sabiendo que era lo que su esposo buscaba, aquella noche era donde se definiría todo así que sin mas esperar se giro para corresponder al beso pasional que su esposo le estaba dando, cuando lo cargo como si de un papel se tratara no pudo evitar el soltar un gemido suave que recayó en la parte mas baja del Lan haciendo que el deseo de ambos aumentara

ni siquiera sabe el como llegaron al cuarto sin tropezarse con toda la ropa que iban botando por el pasillo9, solo supo que cuando ya estaba en la cama se encontraba desnudo, jadeante y deseoso de que su esposo lo tomara de forma ruda como a ambos le gustaba, abrió los ojos despacio notando el físico escultural que tenia el contrario, sus labios no podían  estar4 mas maltratados debido a las fuertes mordidas que se daba para acallar los gemidos que se morían por salir de su interior, el mismo abrió sus piernas mostrándose en todo su esplendor y supo que lo había hecho bien cuando un gruñido profundo salió de la boca del contrario, cuando el Lan se inclino sobre el para besarlo supo que al otro día necesitaría un  cojín en el trabajo, se besaron con pasión, deseo, con amor y con una esperanza de que esta vez si funcionara, el Lan bajo por el cuello de su esposo hasta llegar al pecho y jugar con sus pezones dejándolos completamente duros, siguió bajando por su vientre donde jugo con su ombligo y en su mente emitía pequeñas oraciones de que pronto allí estuviera su hijo, bajo un poco mas hasta llegar a aquel pequeño camino que lo llevaba a la parte que mas le fascinaba de su esposo (aunque siendo sinceros, que parte no amaba el del Jiang)

Jiang Cheng: ohh.. aaahhh... A-A-Huan no.. no te detengas..

siguió por aquel camino hasta toparse con la gran erección de su esposo, la tomo con sus manos para llevarla a su boca donde la disfruto como si fuera un dulce, cuando su boca se vio llena de la esencia de su esposo se alejo con una sonrisa mientras abría sus piernas acomodándose mejor entre ellas

Lan Xichen: voy a entrar mi amado loto

Jiang Cheng: aaah.. aaah.. tu so-solo entra...

con una sonrisa enorme fue entrando de a poco en la cálida entrada del contrario sintiendo como lo aprisionaba entre sus cálidas paredes, era increíble como a pesar de los años su amado A-Cheng todavía podía seguir tan apretado, una vez lo vio listo y adaptado a su tamaño comenzó con el verdadero vaivén de caderas robándole mas que gemidos al contrario, una fina capa de sudor los cubría a ambos debido al esfuerzo de sus movimientos, la forma en que el de ojos violeta se retorcía en la cama o tiraba de las sabanas eran el máximo placer para el contrario quien con cuatro rudas embestidas mas se corrió en su interior llenándolo por completo.

pasaron toda la noche entregándose a su placer y ya entrada la madrugada por fin decidieron descansar, el Lan estaba dormido entre los brazos del Jiang sin notar la turbación de los ojos de su esposo

"mi amado A-Huan no quiero que sientas que esta fue mi despedida, no soportaría verte pensando eso" pensó mientras besaba su cabeza para finalmente dormirse, a la mierda la empresa, era el dueño y jefe así que podía permitirse llegar tarde ese día o simplemente no ir, si, aquello seria un buen castigo para su hermano por no llegar nunca a la hora.

30 días para salvarteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora