Rem & Nym

Me atreví y perdí

La puerta de la habitación estaba entre abierta, le empuje un poco y lo vi. Estaba sentado en el sofá leyendo un libro muy grueso para mi gusto ( en realidad a mi casi no me gusta leer). Pensé si realmente debería hacer lo que tenía pensado, llevaba todo el día imaginando como sería la escena, lo medite un tiempo y al fin me atreví.
Entre y el levanto la vista, me sonrió y cerro el libro marcando la página donde se había quedado.
REMUS: Hola, Tonks. ¿Como ha ido tu día?
N: Hola Remus, pues creo que bien; Y me encogí de hombros. Camine y me senté a su lado... Era ahora o nunca.
Tome su mano entre las mías, lo mire a los ojos y comencé mi discurso ya pensado.
N: Remus... Tengo que contarte algo. Mira yo se que puede sonar te raro que entre así nada más y te diga ésto pero... Te amo. Estoy enamorada de ti desde hace tiempo y se que quizás creas que es solo una mala interpretación de mis sentimientos ( así como se lo había escuchado decir a sirius una tarde en la cocina, nadie sabía que había escuchado esa conversación) pero estoy completamente segura de lo que siento por ti.
Remus no dijo nada, se quedo paralizado pues nunca nadie le había confesado así sus sentimientos. La miro una expresión de ternura y... ¿Amor? O al menos eso pareció porque en ese momento ella lo jalo hacia sí...y lo besó.
Primero fue un roce algo insignificante pero al ver que el no retrocedido se atrevió a mas  y paso una de sus manos de tras de su cuello, ella jamás había sentido algo como eso y él, bueno el parecía petrificado.
  Después de una segundos el respondio su beso y puso su mano sobre su cintura, pronto ese casto beso fue a más para cuando el reacciono ya tenía a Nymphadora Tonks sobre el sentada en horcajadas. Ella tomo una de sus manos y la puso sobre sus muslos y la otra la llevo hacía su pecho haciendo que el ejerciera presión en sus senos por encima de su ropa.
Llego el momento, no sabia como la había dejado llegar tan lejos o quizás si? Quizás el también lo deseaba. Claro que lo deseaba pero no podía ser.
Se la quito de encima de el y se levantó dejando a ella en el sofá, sentada y humillada. La había rechazado... Otra vez.
REMUS: Nymphadora. Que fue? Yo... No sé; comenzó a tartamudear, pues no sabía muy bien que hacer, se armo de valor y dijo.- Esto no está bien, lo siento pero eres mi compañera de la orden, la sobrina de mi mejor amigo y a demás... Una niña, por merlin. Fue una locura.
Salio de la habitación dejando la sola y al cerrar la puerta vio como a una chica de cabellos rosa desvaído le resvalaban unas lágrimas por las mejillas.