Koutsuba One-shots (terminada)

En esta y en la otra

Año 1950, un año de blanco y negro. Donde las personas viven pensando en su mañana que esperan y sea igual de maravilloso como su presente. Las bellas mujeres vistiendo sus hermosos vestidos de cóctel con un conjunto de un saco, los hombres vistiendo trajes elegantes y finos, la época hermosa y adorada para muchos.

Un joven de 23 años vistiendo un fino traje negro con una corbata gris, su cabello rosa con flequillo miraba con adoración aquel soldado de cabellos rubios y ojos azules, adorado por las mujeres y respetados por todos, pues su padre el gran general del egercito con una gran reputación y amable con las personas, además de serle fiel a su país era respetado juntos con sus tres hijos, Minamoto Teru, Minamoto Kou y su adorada hija Minamoto Tiara. Su madre al nacer su hija falleció dejando un vacío en aquella familia al igual que su corazón, ella seguía en los corazones de su familia pero no era lo mismo sin ella, a pesar de su ausencia ellos siguen siendo la bella y hermosa familia que le prometieron a su madre ser.

Sus miradas se cruzaron sonrieron disimuladamente, cómplices de un amor secreto que deseaba ser liberado y demostrar al mundo cuan puro era y deseaba ser aprobado, apoyado por demás sin ser mal visto por las personas. Ellos se verían en su lugar de siempre, donde sembraron su semilla de amor y juraron huir juntos.

Las pequeñas protestas se daban, pero las personas aún no comprendían que ellos también deseaban amar como ellos aman, desean ser amados y quieren dar amor, tal vez solo tal vez, en un futuro las personas puedan amarse como ellos no pueden hacerlo públicamente.

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En aquel bosque con ramas emitiendo el ruido de ser pisadas corrían como si de dos niños se tratasen, sonreían y se tomaban las manos con ligeros roses. Llegaron a un pequeño árbol grande con sus ojas resplandecientes, sus respiraciones eran agitadas recargando sus manos en las rodillas, el rubio se acercó al menor abrazándolo por la cintura.

– Disculpe esta prohibido estar a solas en este grande y solitario bosque. – sonrió mirando al menor negar y recargar su cabeza en su pecho, pasando sus brazos por su cuello.

– Ya no estoy tan solo, esta usted conmigo.

El rubio sonrió apegándose al cuerpo del peli-rosado sintiendo la calidez de este, moviendo los pies hacia tras y tomado la mano del menor empezó suavemente una pequeña danza.

– ¿Recuerdas aquella canción de Elvis?

– ¿Mi favorita? - preguntó siguiendo los pasos.

– Si, esa - busco la mirada del otro - Hay una parte que dice, Pero no puedo evitar enamorarme de ti  - Paro el baile y tomo el mentón del peli rosa - Cada que escucho aquella parte me es imposible no pensar en  ti, eres lo mejor que me pudo haber pasado, eres carismático muy buena persona la mejor que he conocido, eres muy atento con las personas importantes para ti, tu risa es hermosa, tus ojos son hermosos, tus labios son hermosos todo de ti, absolutamente todo de ti es hermoso, que me fue imposible no enamorarme de ti, si corro el riesgo de... algo malo mas bien, corremos el riesgo de algo malo quiero que sepas que en ningún momento me separare de ti porque te amo.

Los ojos del menor brillaban, su sonrisa se agrando y soltando unas lágrimas respondió – Yo igual te amo, te amo y te juro que en esta vida y en la otra, y la que sigue te buscaré, en esta vida y las demás que nos permitan estaremos juntos, esta una promesa.

Sus rostros se acercaron juntando sus labios, un beso simple pero con mucho amor sonriendo en el acto. En esta vida y en la otra se amarían, se buscarían para estar juntos.

– Mitsuba Sousuke, ¿harías el honor de ser mi pareja por lo que resta en nuestras vidas? - dijo kou mientras se arrodillaba frente al menor.

Con sus ojos llenos de lágrimas y una grande sonrisa respondió un : Sí.

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Un kou de 25 años miraba con amor al joven frente al él, vestido de blanco y con la sonrisa más bella que pudo ver, sus vidas serían unidas por fin. En aquel lugar donde se escondían de las personas se casaban las personas como ellos, las que lograron amarse sin salir heridos.

– Minamoto Kou aceptas a Mitsuba Sousuke como tu esposo y pareja hasta que la muerte los separe.

– Acepto.

– Mitsuba Sousuke aceptas a Minamoto Kou cómo tú esposo y pareja hasta que la muerte los separe.

– Acepto.

– Bien, ya saben pueden besarse. – El joven cura vio cómo otra pareja podía ser feliz.

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Un Mitsuba miraba con aquel que ama era atado a la vida de alguien que no ama, su padre no sabía nada de su relación, el no quería que la reputación de la familia de su esposo se arruina, todo aquel esfuerzo que hicieron para mejor el país como para que vaya el y lo heche a perder como si su esferzo no valiera nada. Tarde o temprano se entrarían si, pero sabía que su "suegro" no se lo tomaría para nada bien.

Miró aquel anillo con delicadeza lo retiro, no arruinaría el esfuerzo y la vida de las demás personas, una lagrima recorrió su rostro, quizá sólo para él estaba haciendo lo mejor para una familia con un hermoso lazo de amor y la mejor que relación que cualquier envidia. En cambio el no tenía a nadie, el creer que sus padres sólo por ser sus padres aprobarían su orientación estaba equivocado, se mudo sólo porque sus padres no querían saber que su único hijo había salido con una "enfermedad" huyó de casa porque sería mandado a aquel hospital para hombres y mujeres como el.

Tomó una oja de papel y un pequeño bolígrafo empezó a escribir cuanto lo amaba pero no podían seguir así, su familia era hermosa tal y como es para que la arruine, le desearía lo mejor para el y su futura familia. Tomó un pequeño sobre y junto con la carta hecho aquel anillo.

Unas horas más tarde un joven de cabellos rubios leía aquella carta que su amado dejó.

Minamoto kou, un hombre realmente apuesto e inteligente el más amable que alguien haya conocido.
Lamento decir que no podemos seguir así, nuestro amor siendo escondido y arruinar el hermoso lazo que tienes con tu familia no quiero arruinar nada, quiero que seas feliz y formes una hermosa familia recuerda que te buscaré en nuestras siguientes vidas.
El destino quería que mi vida sea corta, tome la decisión de alejarme y dejar que sigas con tu vida, de todas formas si me elegías me iría pronto y perderías todo, no quisiera que sufrieras. Recuerda porque no pude evitar enamorarme de ti y tus encantos los momentos más hermosos que vivimos, Minamoto kou te buscaré en nuestra siguiente vida es una promesa, cuando te encuentre te abrazare y te diré cuánto que te extrañado.

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Un joven de cabellos peli rosas caminaba por la lluvia de aquella hermosa ciudad, las luces de los edificios le daban vida a las calles. En sus audífonos resonaba la hermosa canción que sentía especial para el tarareando y sosteniendo su paraguas, chocó con un joven de su edad tumbando el paraguas y el en el piso, alzó su vista listo para reclamar pero sus ojos vieron a un joven rubio de ojos azules mirarlo con sorpresa, lágrimas salieron de sus ojos y con la voz temblorosa le dijo.

– No sabes cuanto te he extrañado. – Los ojos de ambos brillaron, desde ese encuentro y muchos más empezaría una hermosa historia.

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