Mi padrastro

Capitulo 18

Mi alma está hecha trozos.

—Bájate del auto.

Dijo el mayor sujetando a la menor del brazo.

— ¿Q-qué hacemos aquí?

Pregunte nerviosa. Al ver el lugar donde se estaciono, al frente un gran edificio, siempre lo veía de paso pero nunca llegue a poner un pie en el. Los rumores dicen que es donde los solteros o casados llevas a sus "pasatiempos" "distracción" "dama de compañía" como quieran llamarlo a pasar el rato. Fingí no saberlo pero no quería entrar al lugar.

—Te enseñare nuevamente como es que se debes obedecerme.

Respondió con una sonrisa.

Bajándome a la fuerza involuntariamente.

—Sígueme y no trates de hacer nada, solamente permanece en silencio.

Dijo mirándome a los ojos, con una mirada penetrante. No sé que le esté pasando pero hoy más que nunca me siento aterrada, colocándome su chaqueta que cubría todo mi uniforme. No solamente tengo miedo de que me pueda hacer a mí, sino el espectáculo que planeé hacerle a mi madre si no hago lo que me pida.

—Apresúrate, amor.

Cambio su expresión de inmediato al sostenerme de la mano, entrando al lugar. Con una sonrisa y reverencia respondía a las personas que nos observaba. "Vergüenza" esa sería la palabra para describir como me sentía en ese momento cuando las personas nos volteaban a ver.

—Alza la mirada. Solo yo puedo juzgarte mas nadie puede hacerlo.

Murmuro.

Alce mi rostro, pero mi mirada se encontraba en el suelo. No logro entenderlo él me causa este dolor y de repente cambia... no sé a qué está jugando.

Su mano se encontraba sujetando mi cintura, mientras su cuerpo cubría el mío. Subimos el ascensor hasta el tercer piso. Llegamos a la habitación 206, nos encontrábamos al frente de la puerta, taehyung se encontraba insertando la clave mientras intentaba contener las lágrimas.

—Entra.

Murmuro el mayor.

Negué mirando al suelo. No pude controlarme más, mis lágrimas comenzaron a escaparse intente controlarme pero ya era demasiado tarde, el lo había notado.

— ¡Qué entres he dicho!

Exclamo, furioso empujándome a la entrada de la habitación cerrando la puerta de golpe. Sujetándome fuertemente lo ambos brazos.

— ¡No me desobedezcas T/N! ¡Te lo he dicho una y otra vez!

Dijo comenzando a jamaquear violentamente de ambos brazos.

— ¡¿Escuchas?!

Exclamo lanzándome a la cama.

—D-de acuerdo...

Fue lo único de que salió de mí boca, me encontraba privada no sabía cómo reaccionar. Intentaba tapar mis piernas con las almohadas mientras retrocedía cada vez más.

—Me estas volviendo loco, yo te amo pero tú ¿me amas?...

Pregunto acercándose a mí.

Negué evitando contacto visual.

—Mírame a los ojos cuando te hablo y responde con la verdad... -Dijo sentándose al lado de la cama junto a la menor, mientras su mano acariciaba sus la piernas. — ¿Ibas hacer algo con él? –Preguntó.