𝑶𝑵𝑬 𝑺𝑯𝑶𝑻𝑺-𝑩𝑵𝑯𝑨✦ 【𝑭𝒆𝒎 𝒓𝒆𝒂𝒅𝒆𝒓】

;ɪᴢᴜᴋᴜ ᴍɪᴅᴏʀɪʏᴀ

Te encontrabas en el baño, sentada en el lavamanos mirabas aquella prueba de embarazo con emoción, Izuku, tu esposo abrió la puerta y curioso se asomó esperando ver aquel par de rayitas que indicaban que en tan solo unos meses tendrían un pequeño bebé, pero, después de esperar hiciste una mueca, le diste la prueba y dejaste caer tu cabeza en su hombro algo triste por ello... llevaban tiempo, bastante tiempo intentando tener un bebé

— T/n, pronto será, ¿si?

Izuku habló siendo comprensivo, dejo la prueba a un lado y te sostuvo por las caderas, te cargó hasta la habitación y te dejó sobre las sábanas antes de recostarse a lado tuyo, suspiraste en voz baja

— Pensé que la tercera era la vencida...
— Bueno, tenemos toda la vida para seguir intentando

Dijo el peliverde y se levantó para acomodarse entre tus piernas, te miró con ojos de amor y se acercó para dejarte un dulce beso en la mejilla

— Una cuarta vez no vendrá mal

Fue imposible contener tu risa ante lo que dijo, sostuviste sus mejillas y te mantuviste haciendo cariñitos, él se ocultó en tu cuello y comenzó a pasear sus manos por arriba de tu ropa, masajeó tu blusa y metió sus manos por debajo acariciando tu piel, con suavidad sus dígitos fueron a tus pechos acariciándolos con suavidad, besaba tu cuello dejando marquitas diminutas y poco a poco iba volviéndose más intenso. A los minutos ya ambos se encontraban completamente desnudos, tu, desde tu posición veías su cuerpo lleno de pecas y solo te ibas enamorando cada vez mas, el besó en medio de tus pechos y fue bajando poco a poco hasta llegar a tu intimidad, con cuidado comenzó a besar tu punto especial de nervios y en tan solo unos segundos ya se encontraba tratando de colar su lengua entre tus labios inferiores, acariciabas sus cabellos chinos mientras que tirabas suavemente de ellos, sentías muy bien su lengua, era una sensación maravillosa

— I-Izuku~

Pediste por su nombre entre gemidos y abriste más tus piernas deseando más de ello, le viste a los ojos y él se alejó de tu intimidad para comenzar a acomodarse entre tus piernas, con su miembro ya erecto comenzó a rozarse en tu entrada ya dilatada por el, su punta daba pequeñas vueltas en círculos sobre tu clítoris haciéndote sentir en las nubes

— V-Voy a entrar

El avisó y abriste tus piernas mientras te mordías el labio, él empujó poco a poco y finalmente, cuando tocó fondo gemiste en voz alta, exclamaste por su nombre y él se acercó a ti, estaban juntos, uno arriba del otro procurando mantenerse juntos hasta el final. Él había comenzado a penetrarte causando escalofríos en todo tu cuerpo, con sus dedos daba pequeñas vueltas en círculos sobre tu punto especial y tu solo te retorcías, rasguñabas su espalda con cuidado pero él no disminuía, en cambio golpeaba en ti, muy fondo con más ímpetu que antes. Jadeó tu nombre en tu propio oído y acaricio tu cuello repleto de pequeñas mordidas ambos corriéndose al mismo tiempo, dejó todo dentro de ti haciendo que tapases tu rostro en su hombro, te escondiste ahí y jadeaste como un perro en celo, ambos estaban cansados. Izuku salió de ti y en vez de recostarse fue por una pequeña toalla con agua fría, comenzó a limpiar el sudor de tu cuerpo, tu solo reíste porque aún seguía desnudo

— ¿Me estas presumiendo tu cuerpo?

Hablaste mientras levantabas una ceja, él apenado corrió a ponerse unos bóxers, comenzó a reír al regresar

— Solo me mostraba ante ti, así como dios me trajo al mundo

Besó tus labios y se limpió por igual para después recostarse a tu lado, se acurrucó por detrás

Muchos meses después 🫶

El parto había sido de menos. Yacías recostada boca abajo en tu cama, tratabas de dormir por unos minutos mas la pequeña bebé que ahora cargaba tu esposo en búsqueda de tranquilizarla no cooperaba, la pequeña lloraba como si se estuviese moviendo. Ya había comido, había eructado, había hecho del baño, ya la habían cambiado y hace tan solo unos minutos pero la criatura no dejaba de llorar

— Ya ya ya~
Akko, por favor trata de dormir~

Le hablaba a su pequeña bebé, besaba su frente y finalmente se rindió, se sentó en la sala con la bebé en brazos y en automático se silenció, era calma la que necesitaba, la pequeña yacía en los brazos de su padre, con los ojitos cerrados, cómoda y feliz. A las 2 horas aproximadamente te paraste de tu cama, te quejaste por el dolor de espalda y al caminar hacia la cocina buscando agua para beber viste a ambos en el sillón con una pequeña sonrisa. Con una grande cobija los tapaste a ambos, besaste la mejilla de tu esposo y simplemente seguiste con lo tuyo... eran tan hermosos, estabas feliz de tener una familia tan hermosa. Eso si, lo llorona lo sacó de su papá

ODA-
Les traje algo suavecito, algo lindo pero jot-
Que ganas de comer brócoli, grr