🌼 𝐒𝐨𝐮𝐫 𝐂𝐚𝐧𝐝𝐲 ⌇ Yeongyu

⊱🌼ϲαρίτυℓο 07

—¿Qué hacemos aquí, Hwang?

—Simple, vine a cambiar mis notas—Sonrió

El más pequeño en estatura abrió la puerta de la sala de profesores que casualmente estaba abierta.

Ambos jóvenes entraron, Hyunjin se sentó frente a una de las computadoras y la encendió, mientras que Soobin solo se sentó en una de las mesas y tomó una de las carpetas sobre esta.

Habían varias, pero, su mirada se posó en una con el nombre de "Nuevo ingreso" ¿Todavía aceptaban alumnos nuevos?.

Decidió no decir nada al respecto hasta que estuviera seguro, abrió cuidadosamente la ligera carpeta y no pudo disimular para nada su sorpresa, solo había registro de un solo estudiante. "Choi Yeonjun".

¿Solo iba a ingresar uno? La L.A.D.E.M. Era famosa por sus múltiples solitudes de ingreso cada año, era difícil entrar y de paso estaban ya en clases ¿Como lo hizo? Soborno quizás.. ¿Por que haría eso? No podía juzgarlo ni sacar conclusiones puesto que no lo conocía, pero, estaba decidido a hacerlo.

Observó por unos minutos la foto y sonrió de lado.

"Es lindo.."

—¿Por qué sonríes?

Esa pregunta logró sacarlo de sus pensamientos.

—Nada, cosas mías—Respondió en un intento de sonar tranquilo.

—¿Te digo algo?—Preguntó Hyunjin mientras movía sus dedos por las teclas precionando estás cuidadosamente

—No preguntes cosas obvias—Su vista se posó nuevamente en la foto del chico, sacó su celular y sacó unas fotos de aquellos papeles

—No pensé que aceptaras venir, pensé que me dejarías por ir con el chico bonito del otro día—Lo miró haciendo que este lo mirará también —Nunca te vi comportarte así con alguien, pensé que llegarían a futuro y tendrían siete gatos. Si tu no lo quieres puedes dejármelo a mi.

Oh vaya.

—¡Maldición!—Exclamó mientras estrellaba repetida veces la carpeta contra su cabeza.

—Si de verdad lo quisieras no lo hubieras dejado plantado en una cafetería, pobre chico..—Se levantó de la silla y se paró frente al menor —Piensalo, perdiste tu oportunidad por idiota.

El de hebras azules se sentía frustrado, lo que decía Hyunjin era verdad. Perdió su oportunidad por idiota.

—Tienes a muchas chicas detrás de ti, ¿Por qué lo quieres a él?—Preguntó.

—Yo no quiero una chica cualquiera, yo lo quiero a él y si tú vas a seguir cagándola déjame el camino libre, si no lo tomo yo otro lo hará.

—No hables de él como si fuera un objeto...

—Sabes que no miento, Choi.

El mayor ladeó su cabeza y suspiró al ver que el contrario no tenía nada más que decir, volvió a tomar asiento y volvió a lo que hacía anteriormente

—Ya ve a buscarlo, si aún tienes tiempo claro, eres libre de irte cuando quieras—Dijo sin mirarlo —Pero escucha bien, si no eres capaz de tomarlo tú, bien.. Lo haré yo.

El de hebras azules salió de la habitación tan rápido como pudo sin mirar atrás.

Ahora solo debía correr con esperanzas que el lindo chico de hebras castañas y leves risos aún estuviera allí.

Y que de paso lo perdonara.

Corrió por las pobladas calles, el viento pegaba directamente hacia su rostro, corría lo más rápido que estaba a su alcance mientras pensaba que excusa le daría al chico.