Mírame antes de que llegue el amanecer

¿Qué es lo que vez ahí Todoroki?

Todoroki es en aspecto un personaje sacado de un drama adolescente. Cuándo las chicas lo miran suspirando sus pulmones de tan fuerte exhalación, mientras que los novios de estas lo miran con rencor; lo que sus ojos ven es a una persona misteriosa, con un pasado obscuro y solitario -cosa que extrañamente les fascina y hasta fantasean con ello-.

Sin embargo, aún que una fracción de esas cosas sean ciertas, la verdad es que Todoroki es simplemente torpe para interactuar. No es simplemente torpe, no, ni siquiera sabe cómo interactuar.

Sí, es verdad que puede lucir frío, cortante e insensible, pero, no es que lo haga a propósito es solo que, cuando se presenta la ocasión, no sabe que decir y termina diciendo cualquier cosa corta para salir del aprieto. Por lo cual, hasta ahora, pocas veces ha sido capaz de conseguir amigos.

Sinceramente para el joven no es algo considerablemente molesto. Sin embargo, a nadie le gusta la soledad y aún que disfrute de ella, a la larga es dañina y sofocante. Quisiera decir que no existe una razón por la cual se aísla del mundo, sería más fácil asumir que Todoroki es simplemente así.

A pesar de sus deseos, Todoroki sabe exactamente la razón de su comportamiento: resentimiento.

Es difícil pensar en la amistad cuando tu mente está enfocada en el auto desprecio, la incomodidad de vivir en la misma casa de tu padre explotador y la desconfianza hacía cualquier persona en general. Desconfianza que le atribuye a una tetera, por muy ridículo que suene.

A veces se pregunta si vale la pena vivir sumergido en el odio que se tiene a si mismo y talvez a la mitad de su familia, quizas es algo infructuoso, más no tiene otras motivaciones.

Acostumbrado a la comodidad de su propio refugio, Todoroki pasa sus días hablando sólo cuando es necesario, siendo observado por unos con envidia y otros con admiración. Nada inusual, todo según lo esperado, a parte del chico que merodea el salón y que nadie más puede ver no hay nada fuera de lo común.

¡¿Cómo que nada fuera de lo común?!

Bueno, para Todoroki no es nada ver personas por los pasillos y cosas así. Desde que obtuvo la enorme cicatriz en su rostro es algo que ve con regularidad. Por lo tanto no le sorprende, siempre hay uno que otro fantasma por ahí, ser héroe es algo peligroso, además la tasa de suicidios en Japón siempre es muy alta. Si es que sabes a lo que se refiere.

Apesar de ello, este le llama mucho la atención, porque este fantasma se emociona con cada uno de los maestros y sus expresiones son imperdibles.

Jamás había visto a uno tan lleno de vida, más que él mismo, cabe mencionar.

Es como un libro abierto, suspira cosas para sí mismo, sonríe, se sonroja, llora, el fantasma es una explosión de emociones muy difícil de ignorar. Haga lo que haga Todoroki se ve absorto en él, su mirada sigue el rastro invisible de sus pasos, el cual causa escalofríos a Denki quien se sienta justo al lado -después de esa mañana se corrió el rumor de que el fantasma de una niña se paseaba por los salones de la escuela. Pero, ese es un asunto que se hablará en otra ocasión-.

Fue este lunes en específico, en el cual trabajan en equipos, que el joven parece más emocionado que cualquiera. Todoroki sonríe a la nada y muchos se preguntan si se le borro el disco duro o algo.

Hasta que los ojos verdes que ha estado siguiendo durante semanas empiezan a llenarse de lágrimas, cayendo de su rostro pesadamente como dos cascadas. Las aperladas gotas de agua inexistente se evaporan en el aire y le regresan el brillo en las pupilas.

Esto le extraña, lo pone inquieto y en cierta forma lo conmueve al punto de mostrar preocupación en su usual cara inexpresiva. Usualmente, los fantasmas siempre mantienen los ojos sin brillo, es lo único que los diferencia de los vivos y ver cómo estos casi parecen resplandecer le ha tomado por sorpresa.