Hacía un sol impresionante. Era ese tipo de sol que calienta todo lo que sus rayos tocan pero respeta el frescor de la sombra. Arrancaba destellos del trigo plantado en el pueblo, y a veces cegaba a los campesinos que miraban hacia las nubes mientras recogían parte de la cosecha. Dave, Haeny y Dydak habían soltado sus hoces, y corrían entre los tallos del alto trigo, intentando cogerse unos a otros. Dave y Dydak perseguían a Haeny, que se reía mientras corría y se escondía. Al reírse tanto, empezó a perder fuerza y a cansarse, y al final Dave acabó agarrándola del codo y pillándola. Los tres amigos, jadeando, se tumbaron en la hierba que había al salir del trigal. No contaban con más de doce años.
-¿A quien le toca ahora? -preguntó Haeny, con sus dos característicos rizos colgando cerca de sus orejas.
-Yo creo que ya hemos jugado suficiente -aseveró Dydak, sin perder de vista las hoces, que estaban clavadas en la valla que circundaba el trigal.
-Yo creo que no -dijo Dave, y, empujando la cabeza de Dydak, se puso en pie y salió corriendo. Éste le siguió, con Haeny desternillándose de la risa detrás. Volvieron a meterse en el trigal.
Ninguno de ellos sabía las verdaderas desgracias que la Humanidad sufría. Habían pasado siete siglos desde que aparecieron los Titanes, y la Humanidad apenas había conseguido no retroceder ante ellos. Estaban divididos en dos. Por un lado, los muros María y Rose, y por otro, el Sina. Los dos primeros daban cobijo a gente que trabajaba de sol a sol para poder alimentar a su familia, y el último alojaba a los jefes de estos, ricos como reyes y sin soltar una moneda de más. Entre estos dos grupos intervenían las Tropas Estacionarias, quienes actuaban como policías en los muros exteriores, y la Legión de Reconocimiento, que era el sueño de cualquier alma intrépida. A menudo se decía que los más hábiles militares eran la Policía Militar, soldados de élite que sólo actuaban dentro del muro Sina para proteger al rey, pero todo el mundo sabía que los que realmente ocupaban ese puesto eran los miembros de la Legión de Reconocimiento. Ellos salían fuera de los muros a explorar y a combatir a los Titanes. Sabían usar de verdad el equipo de maniobras tridimensional, jugando con las cuerdas, los ganchos y la inercia. Tenían una sincronización agudísima, y además siempre aceptaban nuevos miembros. Era comprensible, puesto que muchos daban su vida para que la Humanidad no pereciese. Ellos eran los verdaderos héroes.
Y Haeny, Dave y Dydak querían unirse a ellos. Hablaban con sus miembros a menudo, pues vivían en una pequeña comunidad de granjas, y sus padres criaban caballos para ellos. Cuando iban a recogerlos, les bombardeaban a preguntas, y ellos casi siempre respondían.
Como vivían cerca de un bosquecillo, los tres amigos habían usado varias de las cuerdas para llevar al ganado como si fueran arneses de los equipos de maniobras, las habían atado de las ramas más altas y se enganchaban a ellas para practicar. No era muy difícil mantenerse derecho cuando estabas quieto, pero requería fuerza en las piernas. Se impulsaban entre ellos, e intentaban mantener el equilibrio. Esta y otras cosas eran las que hacían cuando deberían estar recogiendo la cosecha.
Pero en realidad nadie les culpaba. Eran los únicos jóvenes en el pueblo, y aunque estaba casi pegado al interior del muro María, pocos niños del distrito iban allí. Tenían que pasar el tiempo haciendo algo, ser niños mientras podían.
No pertenecían a la misma familia. La madre de Dave era, por así decirlo, la capataz de la comunidad donde vivían. Ella llevaba la contabilidad del lugar, la recogida de cosechas, la cría de caballos y de animales, la obtención de sus productos...además era la que organizaba las jornadas de trabajo. Los padres de Haeny eran profesores, y a menudo frecuentaban el distrito de Shigansina acompañada por los padres de Dydak. Su madre era profesora, y su padre vendía los productos obtenidos en el distrito.
ESTÁS LEYENDO
Shingeki no Kyojin: Suicidal Warriors
FanfictionUn escuadrón peculiar. Un Escuadrón Suicida. La historia de un grupo de amigos cuya afición es matar Titanes y luchar por la Humanidad. Se unirán a la Legión de Reconocimiento, defenderán los distritos de los Titanes, saldrán a expediciones fuera de...