CAPÍTULO CUARTO

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Meses más tarde

Los sonidos de los instrumentos comienzan a envolver el lugar.

- I put a spell on you
Because you're mine

You'd better stop the things you do
I tell you, I ain't lyin'
I ain't lyin'

You know I can't stand it
You're runnin' around
You know better daddy
I can't stand it cause you put me down
Oh no

I put a spell on you
Because you're mine

You know I love you
I love you
I love you
I love you anyhow
And I don't care if you don't want me
I'm yours right now

I put a spell on you
Because you're mine

You know I can't stand it
You're runnin' around
You know better daddy
I can't stand it cause you put me down
Oh ooh

I put a spell on you
Because you're mine

Because you're mine
Because you're mine
Oooh yeah

Mientras canto, miro al público, pendiente o ajenos a nosotros. Peter, sentado al piano, nunca levanta la cabeza a menos que me mire a mí. En la barra observo a Maggie hablando con varias personas y, entre ellas, un hombre de cabello castaño que nos observa de vez en cuando.

La gente comienza a retirarse mientras recogemos las partituras y colocamos el resto. Maggie se acerca a la tarima seguida del joven.

- Chicos, os presento a...

- Chris. – dice y nos observa metiendo las manos en los bolsillos delanteros del pantalón.

- Ellos, son Peter y Raven.

- Mucho gusto. – le estrecha la mano a Pet y yo le ofrezco la mía, haciendo que levante las cejas en expresión de sorpresa, y la acepta.

- Es un hombre importante, tiene mañana una reunión con Geraldine.

- Cuidado, no te metas en lío. – le dice Pet, sonriendo.

- Lo tendré. – sonríe Chris.

- Bueno, voy a recoger un poco la barra. – sonríe Maggie y se va.

- ¿Y qué tipo de negocios hace? – le miro mientras enrollo el cable del micrófono.

- Puedes tutearme si quieres, no soy tan mayor. – sonríe. – Seguramente hasta seamos de la misma edad.

- ¿Alguien quería verme? – viene Geraldine con cara de pocos amigos.

- Sí, yo. Me presento, soy Chris. Hablamos por teléfono. – le tiende la mano y ella lo mira con repudia.

- Ajá... ¿No era mañana?

- Quería hacer una reserva. Si no le importa, quería reservar una mesa para cenar. No me gusta negociar con el estómago vacío.

- ¿Quién le dijo que íbamos a negociar?

- Mi intuición. – sonríe.

- ¡Maggie! – la llama y ella se acerca. – Apunta para mañana a la noche, una mesa para el señor Chris...

- Ponme una mesa decente, traeré gente.

- ¿Qué tipo de gente? – pregunta Geraldine y observo como Fred, el guardaespaldas más fiel de Geraldine, se apoya en la pared de detrás mirando fijamente a Chris.

- Hay que tener precauciones. – señala con la cabeza a Fred. – Usted tiene las suyas, yo tengo las mías. Me esperan fuera.

- Comprendo. – Geraldine asiente y mira a Maggie para que apunte todo.

Shadows #PGP2021Donde viven las historias. Descúbrelo ahora