Jade
—Después de esa charla rara, todas volvimos a dormir, hasta que otra maldita vez, Cat me despertó.—
Jade estás dormida?—
Sí, sigo dormida, vete.—
Entonces como me respondiste?—
Agggh, dios por favor… ¿Qué quieres?— me senté en el sillón, no era muy cómodo que digamos dormir allí.—
Tengo miedo.—
De qué o qué?—
Es que escuché ruidos, creo que hay un monstruo en el armario.—
¿Cuántos años tienes? ¿3? Es tu imaginación, ahora vete a dormir, ya es muy tarde.—
Por favor Jade.—
No.—
Por favooor.—
¡Okay! está bien, ven, duerme conmigo.— Traté de darle espacio para que se acostara.—
¿Que? No, yo quiero ir con Tori, antes de dormir contigo prefiero al monstruo.—
Que irrespetuosa, además, si tanto quieres a Vega, ¿Porqué no vas con ella y dejas de molestarme a mí?—
Quería que me acompañaras donde ella.—
…Si te llevo, me prometes que ya no molestaras?— Ella asintió repetidas veces, me levanté, la tomé de la mano y la encaminé a la habitación de Tori.—
Vega... Vega!— tocaba su puerta pero ella no respondía, así que decidí entrar.— Oye.—
Hmm.. ¿Qué?— Seguía un adormilada.—
Cat escuchó un ruido y ahora tiene miedo, dale espacio para que duerma contigo.—
Ah, claro, ven Cat.— Se dio la vuelta y dio golpecitos para que se acostara.—
—Ella hizo caso y se acostó, yo ya me marchaba hasta que recordé que tendría que caminar mucho para volver al sillón incomodo en el que dormiré, desanimada decidí dormir allí también.—
Cat... haz espacio, yo también dormiré aquí.—
Oky.— Respondió un poco dormida, yo me tumbé en el lugar que había conseguido, y por fin, volví a dormir cómoda.—
[…]
—Eran tan solo las siete de la mañana, y OTRA VEZ me despertaron, no puedo creer que no respeten mis horas de sueño, pronto la paciencia se me va a acabar.—
—Por lo que escuchaba creo que estaban cocinando, espero que al menos hayan hecho algo decente.—
Buenos días dormilona.— Me saludó Vega.—
Que tienen de buenos?—
Ay, qué carácter ¿Porqué estás de malhumor hoy?—
¿Porqué NO lo estaría? Es la verdadera pregunta. Esa niña y tú me estuvieron despertando ayer todo el tiempo, no respetaron mis quince horas de sueño.—
¿¡QUINCE!? Pero lo normal son ocho.—
“Pero lo normal son ocho, soy Tori Vega, siempre hago lo correcto y corrijo a los demás”— Empecé a imitar su acento, me divertía ver cómo se enojaba por eso.—
Yo no hablo así!—
No me importa.—
Oye Tori, ¿Puedo decirle yo?— Interrumpió la pelirroja.—
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Don't Be Shy (Jori)
RomanceVictoria Vega y Jadelyn West, dos chicas con una enemistad, podrían llegar a ser... ¿otra cosa?