Capítulo 10

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Suna cargaba sus cosas, su mochila con básicamente nada, solo cargando una que otra cosa que consideraba quizás necesitaría

Así caminaba con su teléfono en el bolsillo y sus audífonos con un volumen adecuado, tarareando parte de las canciones de las cuales se sabía alguna parte, asegurándose de también ir a un paso no demasiado lento para no llegar tarde a su trabajo

La universidad no lo había dejado precisamente agotado, en caso de tener clientes difíciles era mejor mentalizarse para eso antes de entrar en su "modo trabajo"

Suna: ok...haces esto para ganar dinero...

Suspiró, deteniéndose un poco antes de llegar al local, quitándose sus audífonos, desconectándolos y cerrando la aplicación de música, guardando su teléfono en su bolsillo de regreso y sus audífonos en la mochila

Suna: si alguien no sabe la diferencia entre café americano y expreso no hay razón para gritar Suna Rintaro, te están pagando por atención al cliente, espera tres años y tienes tu carrera de contabilidad y un hermoso equipo de voley, no vas a tener que volver al café

Susurró todo para si mismo, comenzando a caminar hasta su trabajo, entrando al lugar, el suave aire acondicionado se sentía con solo abrir la puerta, y se encapsulaba al estar allí, al menos era bueno trabajar en esa temperatura

Pasó para ponerse el delantal de su trabajo, para luego despedirse de la chica que estaba en el turno de la mañana, quedándose él en la caja, esperando a que llegase alguien

La tarde caía con lentitud, pero todo comenzó a agitarse una vez la hora del café prácticamente ya estaba sobre sus hombros, así Suna se veía en obligación de no sólo usar la calculadora, sino también aplicar la matemática básica que había aprendido en escuela y lo que podía recordar, de una u otra forma había pasado de no tener clientes a tener una fila que atender, no tener nada que hacer le aburría, tener demasiado que hacer le daba pereza, pero una vez el reloj había marcado las 6:30, prácticamente no había nadie en el lugar, quizás solo alguna que otra persona haciendo su propia tarea en alguna mesa, tomando el café más simple y barato del lugar (definitivamente, algún estudiante o reciente asalariado)

Así con más calma suspiró, apoyándose contra el mueble que sostenía la caja registradora, parpadeando lentamente intentando distraerse con algo, más de la mitad de lo ganado en el día iría para el café en vez de sus bolsillos, ese pensamiento solía entretenerle, pero suficiente, no quería seguir deprimiéndose al ver que su paga en vez de aumentar solo seguía en el margen, aún así eso resultaba mejor a tener un rebajo

Así comenzó a buscar en su mente con algo con lo cual entretenerse, aún quisiese pensar en ya querer irse, entonces recordaba a Osamu, recordándolo a él entonces se le venía a la mente que debía hacer dinero si quería comprar cosas para seguir llevando sus deseos más allá, pero si pensaba en Osamu comenzaba a querer pensar en sus muslos siendo golpeados, y en su jodido culo siendo expandido para ser follado, y allí era momento de detenerse, estaba en el trabajo, no en medio de su habitación donde si se ponía duro podía arreglarlo con facilidad

Y así en sus pensamientos el –disculpe– de su cliente le interrumpió

Suna: lo siento, era un café americano, ¿verdad? Está algo caliente así que le recomendaría salir con su abrigo

Su "modo amable", su modo de ser en el trabajo, así a veces recibía quizás un poco más de propina, como era en este caso, atendiendo al último cliente, para luego de verle salir lograr ir a guardar su delantal, arreglar un par de cosas y luego ponerse su abrigo, al estar en un lugar frío salir al calor podría provocarle un refrío

Una vez listo salió del local, su abrigo beige arreglado y su mochila solo en un lado de su espalda, tomando su teléfono y audífonos, comenzando a caminar

Había llegado relativamente rápido, abriendo la puerta con sus llaves, entrando y cerrando la puerta de regreso, quitándose los zapatos para adentrarse

Suna: ya llegué

Osamu llegó a su lado casi de inmediato, sosteniendo dos CD's en sus manos, haciendo a Suna suspirar cansado

Suna: oh Dios dime que no encontraste eso entre mis cosas
Osamu: si, fue entre tus cosas
Suna: no quiero comenzar con estupideces como "pongamos reglas", simplemente no mires mis cosas

Intentó tomarlos, aunque Osamu impidió aquello, mirándole de mala gana

Suna: ...no estás molesto enserio
Osamu: no, bueno, ese no es el caso
Suna: es porno Osamu, sólo son CD's, ¿tu y tu hermano no tenían revistas y esas cosas?
Osamu: no
Suna: ¡mentira!
Osamu: bueno, si, es mentira

Mostró nuevamente los discos a Suna, el cual no estaba totalmente dispuesto a discutir por eso

Osamu: pero me tienes a mi, no los necesitas
Suna: estaban guardados, claramente no los uso seguido

Se los arrebató a Osamu, solo era porno barato de un puesto que había encontrado en la calle, no había sido caro y el disco estaba quemado

Suna: era emocionante en ese tiempo porque no sabía que iba a encontrar cuando pusiese el disco
Osamu: ¿recuerdas lo qué hay en el disco?
Suna: ah...es  complicado

Miró por unos segundos a los discos para luego mirar  Osamu

Suna: ¿Quieres verlos? Ya sabes...por el bien de la duda

Estaba algo cansado, solía terminar así después de trabajar, discutir sobre lo que tenia guardado desde hacía al menos cuatro años no era algo que quisiese hacer, prefería gastar sus fuerzas en alguna ronda de buen sexo

Suna: ¿y?
Osamu: está bien
Suna: ¿quieres ponerlo en el televisor?
Osamu: ah- Nunca he hecho eso
Suna: son ventajas de no vivir en apartamentos

Sonrió emocionado, caminando despacio a la sala, dejando su mochila en una esquina en el suelo, par luego encender el lector de discos

Suna: hace cuanto no uso un DVD...
Osamu: ¿no solías ver películas?
Suna: hay millones de lugares en internet donde puedes verlas
Osamu: igual con el porno

Suna miró a Osamu de mala gana, aunque esto solo le terminó por provocar risa

Suna: no es chistoso

Aclaró mientras sacaba el disco, cuando lo había comprado el internet no era tan bueno, aún lo fuese, esconder un disco entre el otro montón era fácil

Osamu: me gusta como te ves cuando comienzas a perder la paciencia
Suna: no estaba perdiendo la paciencia

—Los gemelos siempre han logrado sacarme de quicio más rápido que el resto— pensó Suna asegurándose de que el disco con el tiempo no estuviese rayado

Suna: Osamu, una cosa antes de poner esto...
Osamu: ¿qué sucede?
Suna: sabes...a mi...también me gustan las mujeres

Le observó, se miraron fijamente por un momento

Osamu: ah...eso
Suna: cuando compré esto no estaba tan seguro sobre mi orientación, así que probablemente no sean hombres
Osamu: ¿estás intentando preguntar por mi orientación?
Suna: algo así

Osamu se quedó un momento en silencio, no había sido específicamente incomodo, solo comenzaba a cuestionarse qué responder

Osamu: solo pon el disco, ya lo habías dicho antes, de adolescente tenía revistas y esa clase de cosas
Suna: claro...

Suna puso el disco, no estaba seguro de hacer eso, Osamu no había terminado por darle una respuesta que lograse satisfacer su curiosidad o aclarar algo para darle seguridad de lo que hacía, ahora sería difícil concentrarse en la situación sin pensar que el momento había sido incomodo

Continuará...

Sexo para la tarea - Osasuna Donde viven las historias. Descúbrelo ahora