Destino Entrelazado

Capítulo 8:Pies Fríos

La frialdad del aire se podía sentir en la habitación mientras los dos se miraban el uno al otro. Una suave brisa hizo que las ventanas improvisadas crujieran un poco cuando Bennett miró a Barbara.

"¡Desnúdate, date prisa!" Dijo en un tono de urgencia cuando su arnés de equipo cayó al suelo.

Hubo unos momentos de silencio entre los dos cuando el rostro de Barbara lentamente comenzó a ponerse rojo. Sus pálidos dedos agarraron el abrigo que el chico le prestó mientras ella retrocedía ante su inesperada orden.

"¡¿Q-qué quieres decir con desnúdate?!" Barbara tartamudeó mientras se apretaba más el abrigo.

Recordó su trato antes de irse. Se suponía que debían decirse algo el uno al otro. "¿Lo va a decir con sus acciones? ¿Es así como se siente por mí? No sabía que era tan agresivo ..."

"Es por tu propio bien. No tomará mucho tiempo, no te preocupes."

"Mientras encienda el fuego ... la ropa se secará rápido". Bennett pensó mientras se quitaba el chaleco. Ella jadeó al escuchar su respuesta.

Miró a Barbara, que lo miraba con una expresión que era una mezcla confusa de ira, vergüenza y confusión.

"¿Barbara?" ¿El frío ya empezó a afectarla?

"Bennett, no creo que sea el momento adecuado para ..." Ella apartó la mirada tímidamente mientras se colocaba torpemente el cabello detrás de la oreja derecha.

"Quiero decir, no estoy lista para ... ya-ya sabes ..." Hizo una pausa mientras se atragantaba con la siguiente palabra que se suponía que tenía que decir.

Bennett la miró con expresión estupefacta. "¿Qué?"

"... ¡Y-y además! Tienes que darme tiempo para pensarlo antes de dejarte ... quiero decir, antes de que ... uh ..." Ella se apaga con su frase cuando Bennett la mira con los ojos entrecerrados.

"¿Eh? ¿Pensar qué? ¿Qué te pasa?" Bennett se puso las manos en la cintura.

"Nos congelaremos si nos mantenemos mojados. Podemos secar nuestra ropa con eso" El chico señala una cuerda que colgaba cerca de la chimenea.

"Oh." Barbara se detuvo un momento al darse cuenta de lo que quería decir. "¡Oh! Pensé ..."

"¿Que esperabas?" Él la miró molesto. ¿Dónde está su sentido de urgencia? No sobrevivirá a su próxima aventura si se queda así ...

Sus ojos se abrieron y sintió que el calor le subía a la cara. ¡Entendí mal! Gritó internamente. ¿Qué pensaría Bennett si supiera lo que ella piensa?

"¡NO IMPORTA!" Giró en el taburete en el que estaba sentada mientras se alejaba de Bennett.

"Espera. ¿Por qué estoy enojada? Fue un malentendido, ¿verdad?" Pensó.

"¿Eh? ¿Por qué estás enojada? Solo digo-"

"Lo sé. Solo ..." Se llevó la mano a la cabeza para frotarse la frente. "... olvídate de lo que dije antes, ¿de acuerdo?"

"Eh." Bennett relajó los hombros. Todo lo anterior pasó por encima de su cabeza, aparentemente.

"Me daré la vuelta y prenderé fuego. Mientras tanto, puedes quitarte la ropa para secarla y ponerte esa manta".

"Oye, no mirarás, ¿verdad?"

"¡Definitivamente no miraré, así que no te preocupes!" Bennett hizo un gesto con la mano mientras intentaba encender el fuego.

"Es vergonzoso desvestirse frente a Bennett, pero ..." Barbara se levantó del taburete y mantuvo los ojos en Bennett.

El chico maldijo un poco mientras dejaba caer el pedernal en la chimenea.