Un Solo Futuro (Draken x OC) [Finalizado]

Capitulo#1: Solo tú

Narra Fumiko

—Soy Kásei Fumiko, si piensan que de verdad es un gusto en conocerlos están muy equivocados, por mi todos pueden irse al infierno

La sala de clase se mantuvo en silencio por unos segundos, el maestro quien a simple vista no imponía autoridad, me asigno un puesto a lo último de las filas

Ya es la quinta vez que me expulsan en una institución, los motivos son variados y razonables para que me deportaran. Mis presentaciones eran siempre iguales, no me interesaba enlazar algún tipo de amistad ni con las mujeres y peor con los hombres

Al sentarme en mi puesto, observo de reojo como unos muchachos se me quedan mirando de arriba abajo, no los culpo, es su naturaleza nunca pensar con la cabeza que tienen allí arriba, si también lo tuviesen, claro esta

Como de costumbre no presté atención a lo que decía el viejo y me recosté en el pupitre, durmiéndome en el instante

—com...compañera...Ká...Kásei-san

Abro mis ojos con pereza al escuchar a alguien llamándome, al levantar mi cabeza me encuentro con una chica con claros signos de timidez

—que—dije tajante

—es...hora del receso y...tenía pensado preguntarle...si desea almorzar con nosotras—me señalo unas tres chicas más, que me saludaban con amabilidad

Las miré con curiosidad para luego dirigir mi mirada a la que me estaba hablando, no pude evitar sonreírle

—dime una cosa muñeca—apoye mi codo en el pupitre para recostar mi mejilla en mi mano sin dejar de sonreírle—¿no escuchaste lo que dije al inicio? No tengo interés en conocerte ni a ti ni a tus amigas, ya te puedes marchar de mi vista

La chica con los nervios y el miedo presente, se disculpó para luego ir corriendo con sus amigas, quienes también me miraban con nervios y desaprobación

Me levanté de mi puesto y salí de la sala, mi estómago rugió por un poco de atención

Y hoy no traje dinero

Caminé un buen rato, ya que me perdí en el camino, hasta llegar al comedor, aún tenía tiempo para probar bocado

Me senté en una de las mesas vacías y cuando sentí que alguien me estaba mirando, imité su acción.

Un muchacho, al parecer de último curso le había llamado la atención, le sonreí con delicadeza y le guiñé un ojo. Todos son iguales, una cara y cuerpo bonito puede dominar a cualquiera de estas bestias, si sabes manejar correctamente sus pocas neuronas.

No me costó ninguna gota de esfuerzo en dominar aquel chico, unas vacías y simples palabras bonitas, miradas y sonrojos de una falsa inocencia, y gracias a esa actuación, mi estómago está satisfecho al comerme su almuerzo

—en serio que son lamentables

Nuevamente espere a que las horas de clases se terminaran para por fin ir a casa. Recojo mi maleta y salgo de la sala, primer día y vamos genial no me he metido en problemas

—¡Fumiko-chan! —retiro lo que pensé hace un momento

Frunzo el ceño como signo de molestia, me giro para ver quien tuvo el descaro de llamarme así, un muchacho se aproximó con un muy notorio sonrojo. Que desagradable

—quería preguntarte si podría acompañarte a tu casa, ya sabes, podrían hacerte daño en el camino

—¿Quién eres?

—so...soy Gen...el que compartió almuerzo contigo

—aah, sabes—una ligera sonrisa remarco mi rostro, provocando que el sujeto se sonrojara más de lo que ya estaba—una escoria como tú no tiene el derecho de seguirme a casa, es mas no te atrevas a llamarme con ese patético honorífico...no, reitero, no me vuelvas a llamar en tu patética vida