"siempre estaremos juntos"
Es la frase que todas las personas dicen antes de separarse. Parece un ciclo del que nadie escapa en estos tiempos, nadie se esfuerza por luchar por lo que quiere ya que prefieren dejar ir y sanar y está bien, es bueno dejar ir lo que no nos hace bien, lo que no nos suma, es bueno dejar ir a personas que no dan ni un paso por nosotros, pero que hay con aquello de reparar, de mejorar, de luchar, de ser constantes y no dejar que todo se pierda.
¿Qué hay con eso?
Hay personas que dan más de lo que tienen para ver a una persona feliz.
Este mundo está lleno de mentiras, dolor, tristezas, decepciones, orgullo, rencor y millones de cosas más. Sin embargo tienes una persona la cuál te hace escapar del mundo, que te hace ver todo diferente, te hace ver qué no todo es igual. Una persona la cuál te llena de amor, tranquilidad, paz, cuidado, atención y confianza. Esa persona te hace ver el mundo diferente, te hace ver todo con más color, más sentido, más ganas.
Esa persona la cuál es un soporte en nuestras vidas en donde nos refugiamos cuando sentimos que no hay salida para nuestros problemas, cuando sentimos que no podemos seguir, cuando queremos dejar todo tirado y simplemente rendirnos, ahí está esa persona para levantarnos, para ayudarnos a seguir adelante, esa persona que llena el vacío de cada caída, esa persona que nos hace ver felicidad encima de la tristeza.
¿Pero qué pasa cuando esa persona se va?
Cuando no hay nadie todo es más complicado, no tenemos a ese soporte que nos ayude a salir de las dificultades de la vida, nos guardamos todos los problemas los cuales son más cada vez. Pero llega un punto en donde sientes que no puedes más, los problemas te agobian, la tristeza te invade, el dolor de cada situación te hacen trizas mientras tú única compañía es la soledad.
En ese momento no sabes si seguir o tirar todo. Comienzan a llegar esos buenos recuerdos con la persona que solía estar para apoyarnos, llega la nostalgia con cada pensamiento, cada momento hermoso junto a esa persona se vuelvo triste porque simplemente ya está ausente, cada recuerdo feliz y con color se vuelve triste y gris. Miras las fotos y recuerdas lo que sucedió ese día y comienzas a derramar lágrimas, colocas música para despejar tu mente y de repente suena esa canción la cuál te hace recordar a esa persona y lloras hasta dormir.
Parece un ciclo emocional del que nadie escapa, simplemente te hundes cada vez más en tus pensamientos.
Tratas de olvidar todo y seguir con tu vida pero hay algo te lo impide, algo te dice que debes luchar, que debes seguir, que no debes rendirte. Pero qué haces cuando todo está perdido, cuando todo te dice que renuncies, cuando no hay nada de dónde comenzar a construir.
Te confundes y no sabes que hacer, estás en el libre albedrío donde no sabes que decisión tomar.
Ahora la pregunta es...
¿Sigues o te rindes?
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"Uno a uno"
Teen FictionUna historia de un romance juvenil donde se aprenderá que de debes cuidar para no perder.