Capitulo 2

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Capitulo 2

Frankenstein farfulló. "¿M-matrimonio?" Miró a Raizel con desesperación. "¿A su hija?"

Raizel ladeó la cabeza. Él mismo estaba un poco confundido. Al mirar por la ventana, sintió la fuerte presencia no solo del Señor, sino de todos los Líderes del Clan que se concentraban en su mansión. Estaba desconcertado y le avergonzaba admitir que al principio había relacionado esta extraña visita con las inusuales payasadas de Frankenstein. Pero había sentido la confusión y la honestidad de su vínculo, por lo que ese pensamiento había sido rápidamente descartado.

Entonces el Señor había hecho la repentina declaración de que Frankenstein se casaría con su hija.

Raizel había esperado a que Frankenstein procesara todo. A través del vínculo, sintió que su vínculo llegó a un acuerdo con esta nueva información. Sin saber qué hacer, Raizel se quedó callado. No sabía cómo ofrecer su ayuda, pero era obvio para él que Frankenstein no tenía ninguna intención de casarse con Raskreia.

Raizel se aclaró la garganta. "Frankenstein, si quieres, hablaré con el Señor en tu nombre".

Los ojos azules de Frankenstein se alzaron para mirar a su Maestro. Su expresión, mientras que para otros, puede haber sido ilegible. Pero no para él. Raizel podía leer a su sirviente a través del vínculo y observándolo. Raizel no vio pánico en los ojos de Frankenstein, solo una astuta determinación.

"Oh, no se preocupe por eso, Maestro. Ni siquiera necesito pensar en este asunto. Ya he tomado una decisión".

Qué inesperado. "¿Tu tienes?"

Frankenstein asintió. "Sí." Sonrió, sus ojos azules casi brillando en la penumbra de los pasillos. Pero Raizel sintió que se activaba el vínculo mental entre los dos.

" Maestro, si me lo permite, me gustaría pedirle que rompa el sello."

" ¿No pretendes luchar contra ellos?" Era una pregunta honesta, ya que Raizel no podía sentir verdadera ira u hostilidad por parte de Frankenstein. Sólo regocijo perverso.

" No el sello de Dark Spear", dijo Frankenstein. Luego, sonrió. " Sobre mi picardía". Enderezándose, Frankenstein declaró en voz alta: "Aceptaré el honor de recibir a la hija del Señor como mi esposa".

En ese momento, la gran puerta se abrió una vez más para revelar al Señor extático. "¡Maravilloso! Sabía que verías la verdadera belleza detrás de esta unión. Obviamente, estabas tan abrumado por la conmoción que solo tenías que cerrarme la puerta en las narices para aceptar esta noticia".

Raizel vio como Frankenstein inclinaba la cabeza. "Sí," estuvo de acuerdo el humano. "Fue bastante inesperado".

Raizel podría dar fe de eso.

El Señor aplaudió. "Ahora refréscate para que pueda llevarte a ver a mi princesa que me espera". El Señor parecía dispuesto a hacer cabriolas en ropa de dormir, e incluso algunos de los Nobles parecían un poco contrariados por haber salido tan tarde.

Pero Frankenstein levantó una mano. "Por favor, espere un minuto." Con las manos cruzadas a la espalda, Frankenstein sonrió con mucha educación. Pero eso solo hizo que las sospechas (e interés) de Raizel crecieran. Así que el noble decidió quedarse callado (como siempre lo hacía) y observar cualquier plan que Frankenstein estuviera armando.

Tenía que haber un plan, ¿verdad?

"Según las costumbres humanas, necesitaré algo de tiempo para prepararme para conocer a mi novia", continuó Frankenstein. "También tendré que preparar una habitación para mi esposa y para mí cuando ella se mude".

Grabe Malentendido NOBLESSEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora