「 ɾҽբlҽcԵíօղ 」

VII

— Yo realmente, realmente me odio
Honestamente, muy seguido. ❜

Namjoon al llegar parecía estar fuera de sí, en silencio organizó la ropa y ordenó la habitación.

Jungkook no estaba, probablemente había salido a pasear o robar, no estaba seguro pero agradecía tener un momento a solas para pensar.

Comenzó a recordar todas las interacciones que ha tenido con el chico, le costaba creer que Jungkook gustaba de él, pensó que el cariño que le tenía era como el de un hermano menor hacia el mayor.

Namjoon no sabía en qué se había equivocado, nunca tuvo la intención de darle señales erróneas al chico.

Por horas estuvo pensando y haciéndose cientos de preguntas, pero fue interrumpido con la llegada de Jungkook.

El chico llegó alegre y con comida, estaba tan sumergido en su propia alegría que no detalló mucho en lo sombrío que estaba Namjoon.

Luego de comer, Jungkook decidió subir al techo del container con ayuda de una escalera que había robado hace poco. Mientras tanto Namjoon se bañó y al salir Jungkook estaba devuelta y con un lapicero en la mano Namjoon entendió que le estaba pidiendo permiso para hacer "tatuajes" en su mano.

Mientras el chico hacia distintos garabatos sobre la piel del mayor, este detalló sus movimientos, la forma en la que lo tocaba, como tomaba su mano y la forma en la que sus ojos brillaban.

Se sintió mal repentinamente, era lástima.

Sabía que si Jungkook sentía algo por él sería imposible continuar una relación como la que llevaban hasta ahora, también sintió miedo por cómo podría reaccionar Jungkook.

Pero aún así ninguno de sus miedos le impidió preguntar.

―Jungkook... Yo, yo ¿Te gusto?

Thighs~