Jihope_SE BUSCA🔎

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Hola papá.

A pasado un año y siete meses desde que te fuiste, Kookie ya está grande y muerde duro y además es muy celoso con Yoonie cuando está conmigo, mamá dice que Yoongi le gusta, que es un enamoramiento de niños y que yo también lo tuve con tío Taemin cuando era bebé, aunque tío Taeminnie es muy torpe y creo que yo estaba mal de la cabeza en ese tiempo.

Mamá llora, sigue llorando cuando piensa que no lo vemos, Jungkook parece preocuparse, aunque no entiende qué es lo que sucede.

Yo sé que te extraña mucho, porque sigue viendo esa foto tuya que guarda en su cartera.

Yo también te extraño mucho, además quiero que Jungkook te conozca, es pequeño y aunque no sabe de ti, a veces lo veo mirar a la nada, como si esperara que aparecieras en algún momento, quizás siente tu ausencia, aunque no sabe quién eres en sí.

Mamá y yo le hablamos mucho de ti, le mostramos fotos y Kookie las llena de sus babas.

Te amo papá y espero que pronto vuelvas, sigo mirando la misma luna todas las noches y espero que tú también.

Cuídate y se valiente.

Taehyung dio un giro sobre sus tobillos apenas termino de guardar la carta en uno de los pequeños sobres que su mamá le dio, aplanando el pequeño pájaro de papel para que cupiera correctamente.

Sus ojos se fijaron en Hoseok, el doncel le sonreía, mientras sus manos y sus sentidos estaban enfocados y alertas en su pequeño hijo.

Jungkook estaba sobre una colchoneta gruesa, dando vueltas y evitando poner esfuerzo de más en sus movimientos por la flojera de tomar sus mordedores, al bebé le estaban saliendo ya los dientes y la comezón molestosa en su encilla le hacía berrear.

Kook no era de llorar, pero sí de molestarse con todo y todos, más cuando le daban calenturas o cólicos o cuando tenía hambre.

Taehyung se acercó al bolso de su mamá y dejo la carta ahí, para poder acercarse a su progenitor y a su pequeño hermano.

Hoseok había abandonado su puesto como repostero principal de su pequeña pastelería cuando su embarazo avanzo y dio a luz, sin embargo lo retomo tres meses después de que Jungkook nació, por lo general llevaba a sus hijos al trabajo y mientras horneaba o prepara postres fríos, los infantes se quedaban en el pequeño cuarto que había habilitado para los hijos de sus trabajadores, sin embargo muchas veces su hermano Baekhyun y su esposo Taemin se quedaban con ellos para cuidarlos y se pasaban por su tienda cuando le tocaba cerrar o cuando Taehyung quería comer algo dulce y eso era casi siempre.

–¿No tienes hambre?—. Pregunto Hoseok, tomando la mano de Jungkook para entregarle el chupón que se le había caído.

Taehyung admiro nuevamente a su mamá. Como siempre lo hacía, Hoseok siempre estaba atento a ambos, dándoles el mismo amor y la misma atención que necesitaban.

Asintió torpemente sonrojando.

–¿Huevos revueltos con tocino? ¿Mermelada y pan? ¿Tortitas y jugo de naranja?—. Pregunto, poniéndose de pie y abrazando a su hijo menor para ponerlo en el porta bebé.

Taehyung medito un momento, levantando sus brazos de forma decidida cerca de su cabeza y apretando sus puñitos.

–Todo.

Hoseok sonrió ante su pequeño goloso y camino hacia la cocina dejando un suave beso en la frente de sus dos hijos.

Taehyung se quedó junto a Jungkook, cuidando a su pequeño hermano, sabía que cuando mamá Hoseok estaba ocupado él tenía la responsabilidad de vigilar al menor.

Él era guardián de Hoseok y Jungkook mientras su papá no estuviese.

Jungkook le miro desde su lugar, removiéndose con enormes risas, le gustaba mucho su hermano Taehyung, aunque le quería quitar a su saco de babas, ese niño con el mar pegado a su cabeza que venía a jugar con Taehyung y le pertenecía a él.

Taehyung sonrió dándole un beso a la rechoncha mejilla de su hermanito y le entrego su mano para que éste pudiese manipularla a su antojo, con el chupón a un lado.

Miro de reojo a su mamá. Hoseok tarareaba una canción sin ocultar la sonrisa triste, mientras caminaba de un lado a otro moviendo trastes y comida.

Esa canción era la que su papá le cantaba a su mamá cuando estaban juntitos y abrazados.

Cuando papá Jimin besaba mucho rato a mamá Hoseok, le acariciaba el cabello y lo recostaba en su pecho, cómo lo hacían con él.

Ojalá su papá volviera pronto.