Por probar no perdemos nada |Harry Styles Y Tu|

Capítulo 108

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Y ahora estamos como en la cena de Noche Buena, pero con la diferencia de que hoy es Noche Vieja, y quien se encuentra en casa cenando conmigo y mis padres, no es Louis, es Harry.

En estos días hemos estado llevando algo de ropa a la casa nueva, hemos comprado algunos objetos decorativos que faltaban en casa para darle "más vida" y hemos colocado algunas fotos nuestras y de la familia.

Al momento de tomar las uvas y abrazar a mis padres felicitando la entrada del nuevo año, me acerco a Harry y nos fundimos en un abrazo, le susurro un "Feliz 2018", a lo que él me responde igual, separa un poco nuestros cuerpos, me mantiene abrazada de lado mientras toma una copa para brindar.

Harry: Me gustaría decir unas palabras...

Papá: Por supuesto hijo, te escuchamos.

Harry: Quiero felicitaros la nueva entrada a este año y desearos que sea mucho mejor que el año que acabamos de dejar. Quiero agradeceros por todo el apoyo que hemos recibido respecto a los bebés, agradeceros el haberme dejado volver a estar en vuestras vidas, os lo agradezco de corazón y ________...

En ese momento se gira completamente para mirarme directamente a mí y mis nervios comienzan a florecer.

Harry: Quiero agradecerte por haberme dejado estar a tu lado en todo momento, sé que nos debemos una conversación, y, aun así, no me muestras rencor, me sigues dando cariño y tratando como no me merezco, no me lo perdonaré nunca, pero te lo agradeceré toda la vida, gracias por dejarme estar aquí contigo.

________: No tienes que darme las gracias Harry, sabes que no soy rencorosa y obviamente que te dejo estar a mi lado en todo momento, eres el padre de nuestros hijos, tienes todo el derecho de estar a mi lado en todo momento.

Harry: El 2017 fue maravilloso gracias a ti por darme la sorpresa de ser padre y sé que el 2018 va a ser mi año favorito porque conoceremos a nuestros pequeños, gracias.

________: No me las des Harry, para ser padres se necesitan 2 personas... No sería madre si no fuese gracias a ti, así que gracias por darme a estos pequeñines.

Nos fundimos en un abrazo y los dos nos susurramos un "Te quiero", y finalmente brindamos los 4, obviamente, yo con agua. 

Tomamos asiento en el sofá de casa, voy a mi cuarto un momento y a la vuelta, me siento al lado de Harry entregándole una cajita.

Harry: ¿Qué es esto?

________: Bueno... No pasamos las navidades juntos y pensé que podría darte hoy el regalo de Navidad.

Harry: No hacía falta.

________: Bueno, si no lo quieres dámelo, yo me lo quedo.

Harry: No, no. Es mío. – Dice como un niño pequeño que le van a quitar sus chucherías.

Quita con sumo cuidado el envoltorio de la caja y se queda mirando en silencio la caja que sostiene en sus manos. Me mira, pero no dice nada. Parece emocionado y confuso a la vez. Y yo, me río de su reacción.

________: ¿Sabes lo que es? – Digo con un pequeño tono de burla. – Abre la caja.

Y es que el dibujo de la caja, es la ecografía de nuestros pequeños.

Abre la caja lentamente, con manos temblorosas, y una vez que ve el contenido de dentro de la caja, suelta el aire que no sabía que estaba conteniendo. Y ahora soy yo la que no sabe cómo reaccionar ante sus acciones. ¿No le ha gustado?

Estamos todos en silencio esperando a que Harry reaccione de alguna manera.

Al cabo de unos segundos en los que Harry se tensa, nos mira a todos y comienza a reír, mis padres le siguen, pero yo sigo seria, no puedo reírme, no sé qué tiene tanta gracia que no dejan de reír, me miran y continúan riéndose. Me estoy cabreando.