Solamente una noche part 4

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Eso era exactamente lo que quería escuchar, pero no estaba preparada para finalmente oírlo. Su corazón parecía que iba a estallar cuando Miyeon dijo esas palabras mientras la miraba. Minnie sabía desde ese momento que tenía que ganar esa apuesta, sin importar que, porque estaba arriesgándose a sufrir un ataque cardiaco haciendo esto con Miyeon.

No podía dejar que la otra chica ganara.

"No quiero." Minnie respondió juguetonamente, cruzando sus brazos en su pecho y volteando su cara lejos de Miyeon. No podía evitar negarle esto a Miyeon por un poco más de tiempo. Después de todo, las mejores cosas llegan a aquellos que son pacientes. Movió su pierna un poco, asegurándose de rozar a Miyeon lo suficiente para frustrarla más.

Debió de funcionar porque, escuchó que Miyeon dejaba salir un suspiro furioso, pero no esperaba para nada la mano que repentinamente empujo su hombro, forzándola a acostarse sobre la cama.

"¿Qué m-?"

Miyeon puso sus dos manos en sus hombros, inmovilizándola debajo de ella. Ella movió sus caderas contra las de Minnie, haciendo que los ojos de Minnie se agrandarán.

"Te necesito Minnie."

Minnie estaba algo aturdida por las acciones de Miyeon, pero sólo la hacían sentirse más satisfecha. Estaba orgullosa de poder hacer que Miyeon se pusiera así, buscando su placer sin que ninguna vergüenza nublara sus pensamientos. Tal vez esto sería un éxito más pronto de lo que pensaba.

"Wow. No sabía que querías ser la activa esta noche," Minnie la provocó un poco más, a pesar de estar atrapada bajo su cuerpo.

Miyeon solo la fulminó con la mirada mientras agarraba la parte delantera de la blusa de Minnie, apretando la tela dentro de su puño mientras la sujetaba bajo suyo.

"Tienes mucha frustración que liberar, ¿cierto Miyeon?"

"Eres... la persona... más... molesta del planeta." Miyeon refunfuñó mientras sus caderas se frotaban contra las de Minnie. Minnie se estaba calentando demasiado por la desesperación e irritación de Miyeon que no pudo evitar mover sus caderas también, causando que ambas gimieran.

"Tomare eso como un cumplido."

Miyeon frunció de nuevo su ceño, pero Minnie podía ver diversión en sus ojos mientras discutían. Esto no era muy diferente de sus conversaciones usuales- bueno, si no contamos los gemidos que ambas dejaban salir cada vez que sus caderas se frotaban y como la temperatura aumentaba en la habitación.

Minnie alcanzó de nuevo el pecho de Miyeon, tirando de forma poco elegante de su sostén de encaje negro para revelar finalmente sus pechos. Ya que Miyeon todavía la sujetaba en la cama, esto era lo mejor que podía hacer, pero valió la pena cuando Miyeon gimió de nuevo después de que rozara sus pezones rosados.

Pasaron unos minutos así, por lo que Minnie podía ver el efecto en Miyeon, a juzgar por su rostro enrojecido, su respiración superficial y sus caderas titubeantes.

"Minnie-" Miyeon se veía preocupada mientras se encontraba con la mirada de Minnie.

"¿Estás bien?" Minnie esperaba no haber hecho nada que pudiera molestarla. Aunque la chica no había detenido sus movimientos, lo que la tranquilizaba.

"Ya casi llego." Miyeon finalmente susurró, como si fuera un secreto vergonzoso. Minnie por otro lado, sentía un rugido de victoria en su pecho. Miyeon se miraba como si estuviera asustada, probablemente debido a toda la ansiedad que había acumulado todos estos años por todo esto. Era probablemente la razón por la que la sujeto contra la cama, como una manera de tener el control de la situación para así no ser rechazada por su compañera.

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