Capítulo único.

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Oscuro. Todo estaba oscuro.

No sabía en dónde se encontraba, pero el apretón en su pecho le dijo que no estaba en un buen lugar.

Ni tampoco en la mejor situación.

Quiso echarse a correr, pues aunque no lograba ver algo, un impulso le hizo querer escapar, dejar todo atrás y encontrar su camino. Sin embargo...

«Un gatito en el tejado, solo sin su Lady».

Se detuvo en seco al escuchar apenas ese perceptible tarareo. Su corazón bombardeó más y más rápido, más y más fuerte. Tanto que podía sentirlo y escucharlo con exactitud en sus oídos. El nudo en su estómago volvió a apretarse, rogando a gritos que salga de ese lugar.

Pero ahí estaba de nuevo. Esa voz... Su voz.

«Un gatito en el tejado, pidiendo que alguien venga a salvarlo...»

Salvar.

Estaba pidiendo ayuda. Él quería ser salvado.

Entonces, decidió quedarse a ayudar aun con todos sus sentidos alborotados al igual que con las ganas de salir corriendo. Y cuando logró mantener la calma, un pequeño rayo de luz apareció. Una escena comenzó a desarrollarse delante de sus ojos, y junto a eso, la voz siguió cantando.

«... Porque somos nosotros contra el mundo, ¿pero qué hago si no estás a mi lado? Eres todo lo que tenía... »

Adrien cerró sus ojos ante la fuerte luz que se esparcía por el lugar, y después de parpadear unas cuantas veces, logró enfocar lo que tenía delante.

Y al verlo todo, sintió un peso en su estómago y su corazón detenerse al mismo tiempo. Entonces entendió el por qué de sus tremendas ganas de largarse de ese lugar.

Se congeló cuando la idea de tener delante de él a su versión akumatizada se ancló en su cabeza. Empuñó sus manos por todos los sentimientos que se empezaban a mezclar en su interior, y apretó sus labios en una línea con tal de no romperse al verse de ese modo.

Si tan solo supieras que sin ti me ahogo —Ahora pudo escucharlo claramente, ese tono tan roto y sin vida, rayando en la desesperación mientras balanceaba sus pies en el aire, sentado en la baranda de la torre Montparnasse—, porque solo soy un gatito en el tejado... Esperando por ti.

De súbito, varias escenas comenzaron a reproducirse en su cabeza. Casi como una película, pero con la única diferencia que esto parecía ser real.

Marinette y él compartiendo momentos que alegraban su vida.

Ladybug y él en la guarida de Hawk Moth.

Él a punto de tocar a Hawk Moth con su cataclismo.

Él tirado en la parte inferior de la Torre Eiffel. Con la cabeza hecha un lío y un sentimiento que nunca antes había experimentado, retrocediendo a duras penas de Hawk... No, de su padre.

Él tratando de evitar a toda costa su propia akumatización, escuchando de fondo las palabras de su Lady y las de aquel villano.

«—¡No lo escuches! —gritaba
ella—. Sabes que deberá pagar un
terrible precio a cambio.»

‹‹ Un Gatito en el tejado esperando por ti ››|| MLB / OS ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora