1×Querido diario×1

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(canción para ambiente)
Volkway》


Volkov
Jueves 12/04

Querido diario: hoy he caído de nuevo en la tentación....

Fuimos a un entrenamiento en la playa, para poner a tope a los alumnos..












Flashback
Narrador omnisciente



-¡Aquí mi fusíl! ¡Aquí mi pistola!- gritaba el Superintendente mientras corría liderando una fila de 24 alumnos.


















-...-

























-¡Repitan muñecas!-

-¡Aquí mi fusíl! ¡Aquí mi pistola!-  repitieron todos al unísono.

-¡Una la tiro, la otra consuela!

-¡Una la tiro, la otra consuela!-

Continuaron durante cinco minutos y pararon para hidratarse.
Con lo que no contaban los superiores (en ese momento el Súper, Volkov, Greco, Gustabo y Horacio), era que los críos de sus subordinados por el calor que tenían se tirarían al agua a nadar.

-¡VUELVAN AQUÍ ANORMALES!- Gritaba Conway. - LOS VOY A EMPAPELAR, VAN A COMER BARROTES... VAN A LIMPIAR MI COMISARÍA CON SU FUCKING LENGUA!- Ninguno de los alumnos le prestaba atención, así que el seguía jodiendose las cuerdas vocales, como de costumbre. (Y la perra seguía y seguía... Ok no).

-Cálmese súper, nunca viene mal divertirse un poco... Saque esa cara de amargado- se atrevió a interrumpir Greco.







































-¡Que tengo cara de ¡!¿QUÉ?!¡- el pelinegro hizo el amague de tomar la porra, dándose cuenta de que, detrás del hombre de barba, se hallaban el rubio y el de cresta alardeando con una sonrisa que le habían sacado todo su armamento con agilidad de ninja.
Eso más que cabrear al mayor, lo hizo sentirse orgulloso de que esos mocosos, que quería como hijos, estaban aprendiendo de él; incluso llegando a superarlo. Pero obviamente, el orgullo puede superar todo matiz de cualquier sentimiento.

-¡Que se creen ustedes gilipollas!?- ya no gritaba, pero su cara estaba roja de furia, una vena en su cuello iba a explotar y su voz era más ronca y profunda de lo normal.- Devuélvanme ya mis cosas-

-O si no qué papu?- si.. el rubio no le temía a la muerte, por ende, amaba sacar de quicio a ese hombre; al que ya le empezaba a agarrar cariño.-No creo que pueda hacer mucho sin su porra. Mejor dicho, dudo que sea algo sin esta bebé- continuó, meneando la porra, como torero a tela roja frente al toro.


-Quieres ponerme a prueba, muñeca?-

-Usted que cree?-











































Si... Lo esperado llegó. El toro se cabreó. Empezó a correr al rubio que aún llevaba la porra en su mano y corría como alma que lleva el diablo.

Mientras esos dos corrían como niños peleando por golosinas, los tres restantes se partían el culo.
Uno en particular reía para ocultar algo más, el peligris reía ocultando la erección que se le había formado al ver a su jefe tan cabreado; imaginando castigándolo de formas no muy cristianas.

Nuestro ruso era una caja de Pandora, ocultaba cada cosa en su intimidad que no se dan una idea. Y una de esas era ser sumiso (bottom), y mucho más si se trataba de su crush desde los 20 años; ahora con 32 seguía perdidamente enamorado de ese hombre serio, reservado y responsable de todas sus pajas desde que reconoció sus gustos sexuales. No podría considerarse homosexual, ya que no le atraían los hombres, solo él, solo Conway; digamos que es ✨Conwaysexual✨.

El resto de la tarde pasó así, Conway aporreando a Gustabo, los alumnos haciendo el tonto, Horacio y Greco metiendo leña para que el rubio recibiera más y Volkov ocultando todo lo posible su erección.







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Una vez estaban subiéndose a los patruyas, Conway notó el bulto en su mano derecha. Mentiría si dijera que el ruso no le parecía atractivo, de hecho le tenía ganas desde que tenía 24; pero como era (y es) su colega en la policía,  trató de sacarse esa idea de la cabeza. Pero ahora, que estaba hecho todo un hombre (y qué hombre!) Tenía ganas de avanzar más allá con él, pero estaba seguro que el contrario no querría nada con él, bastaba solo mirarlo ¿A quién podría parecerle atractivo un hombre tan destruido como él? Alguien que perdió al "amor de su vida", siendo todo su culpa...Tenía muchas inseguridades y miedo al amor, por eso jamás se atrevería a mostrarse y mucho menos poner en riesgo la amistad con su Víktor.



Verlo con una erección, fuera de haberlo exitado, le hizo fruncir el seño y enojarse pensando en quién podría haber causado eso. Él era el único que debía causar eso en su baby.

-Volkov!-

El mencionado maldijo en todos los idiomas su pinche existencia. - ¿Qué necesita Súper?- volteó a verlo algo sonrojado, ocultando de la manera más disimulada posible su querido amigo despertado. -¿Necesita que lo lleve a su casa?-

El mayor se acerco de una manera que hizo temblar al contrario; se lo notaba cabreado y no entendía por qué.

-Me vas a responder una pregunta muñeca.- lo acorraló contra el auto en el cual se iba a subir su subordinado. A todo esto, se encontraban en el estacionamiento de la playa, de noche, completamente solos....
























O eso creían...

















《¤》




-Maru-

One shots- SpainRpDonde viven las historias. Descúbrelo ahora