"Buenos días señor" Están en la oficina del general. Jungkook hizo una reverencia y Tae estaba nervioso.
"¿Qué te trae por aquí? ¿Por qué estás con mi hijo?" Preguntó el general con calma, pero esa calma no ayudó a Tae a calmarse.
"No quiero sonar grosero señor, pero su hijo me ha estado siguiendo desde ayer y se salta los entrenamientos" Tae maldijo en voz baja. Su mirada estaba en sus pies por que no quería ver la reacción de su padre.
"¿Es eso cierto, hijo?" Tae se quedó en silencio por un rato. No sabe si dirá la verdad o no.
"Bueno... sí." Se mordió el labio, sin mirar directamente a su padre. Pero escuchó el suspiro de este.
"¿Por qué te saltas el entrenamiento? Sabes que es pecado rechazar las responsabilidades, ¿verdad?" Tae solo escuchó el regaño.
"¿Por qué lo estás siguiendo?" De todas las preguntas, esa es la más difícil de responder. Quiero decir, ¿qué diría?
-Papá, estoy siguiendo su caliente existencia y cola para salvar mi nota de historia-
¿Eso le diría?
Por supuesto que no. ¿Quién diablos le iba a creer eso? Probablemente lo mandarían a un hospital.
Tae decidió no responder y su padre suspiró.
"No voy a dejar que esto vuelva a suceder" Tae asintió lentamente, mostrando que lo está escuchando.
Todos se quedaron en silencio. Nadie se atrevió a hablar. Jungkook estaba parado quieto como una estatua a su costado. Dios, es tan disciplinado.
Solo tomó un segundos y el silencio se cortó. "Capitán, gracias por informar de esto"
"No hay problema señor"
"Me gustaría que supervisara a mi hijo" La cabeza de Tae se sacudió. Los ojos de Jungkook parecían gritar.
"¿Qué?" Ambos preguntaron al unísono.
"L-Lo siento, pero, que?" Preguntó Jungkook.
El general se reclinó en su silla.
"No sé por qué mi hijo te está siguiendo y por qué se salta los entrenamientos. Y como sé que puedo confiar en ti, quiero que guíes y protejas a mi hijo. Asegúrese de asista a la capacitaciones, y es necesario, disciplínelo"
-Y si es necesario, disciplínelo- Esas palabras resonaron en la mente de Tae. Podía escuchar su corazón en oído. Tenía muchos pensamientos hurgando en su cabeza.
Ay Dios mío.
"S-Señor, no creo que pueda hacer eso. Ya soy capitán, tengo más responsabilidades"
"No tienes que preocuparte por eso. Puedo trabajar en ello. El único favor que te pido es cuidar a mi hijo. Si yo pudiera hacerlo, no tendrías que hacer esto"
"No acepto un no. Puedes empezar mañana. Y Taehyung, tendremos una charla en casa" Esas fueron las últimas palabras antes de que salieran de la oficina. Estupefactos.
Tae inmediatamente golpeó el brazo de Jungkook, pero al final al que más le dolió fue a él.
"Auch, ¿tienes una piedra en el brazo?" Dijo mientras masajeaba la palma de su mano.
"¿Cómo te atreves a golpearme?" Tae lo fulminó con la mirada y le sacó la lengua.
"¿Ves lo que obtuviste? Otra responsabilidad. No debiste haberme reportado" Jungkook lo fulminó con la mirada. Quería lanzarle un puñetazo, pero sabía que estaría en problemas cuando le hiciera eso al hijo del general.
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Capitán Jeon- Desde 1894 /Kookv AU/
Fanfiction"Cuando termine la guerra, nos casaremos, y cultivaré flores como tú, y nuestra historia será una de las historias de amor más hermosas del universo" -Una carta encontrada en el bolsillo de un soldado muerto; Capitán Jeon Jungkook, 1895. 📍Prohibid...