Cuando mis labios pronuncien tu nombre,
Cuando mis ojos miren tus ojos,
Cuando mis manos toquen tu piel,
Deberás saber que mi alma te desea como a nadie,
Un deseo de felicidad, no uno carnal, un deseo de sentimiento,
Uno de esos que ya no se tienen, de esos que se han perdido.
Cuando de mis ojos veas caer lágrimas,
Y mis manos suelten tus manos,
Y cuando mis labios se queden sellados,
Será momento de preguntarme qué sucede,
Y si continuo llorándo, por favor, quédate a mi lado.
Cuando de mi boca escuches que he deseado encontrarte toda la vida,
Y que he tenido tantas caídas,
Que he pretendido dejar de buscarte por pensar que no existes,
Cuando de mi boca escuches que por fin me he enamorado y que esta es "aquella vez" que tanto he esperado,
Y que te quiero amar como a nadie,
Que quiero en tus ojos encontrar mi cielo,
Que sólo tu sonrisa ilumine mis noches,
Y que tu voz sea la más bella melodía que llegue a escuchar,
Que tus susurros sean siempre los que despierten mi piel,
Que tu aliento sea el único que quiera cerca,
Que mi voz sin alzarla a forma de grito, siempre grite tu nombre,
Que todo lo que dé y todo lo que des sea a un "nosotros" y ya no a un "yo"
Cuando de mi boca escuches que te amo, no me dañes, por favor.
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El agua que te rodea
PoesíaEstá dedicado a quien nunca lo leerá. Nunca sentirá lo que se sientió escribir cada una de estas letras. No sabrá cuanto dolió, o cuan hermoso fue escribir esto. Justo cuando existo, ahí es cuando empiezo a extrañarte, o quizá justo cuando empiezo a...
