✶Our Summer✶ 《Omegaverse - SooKai》

✶Capítulo 05✶

N/A: Casi dos meses sin actualizar, por eso les traigo este regalito porque todos nos lo merecemos, más de 6K palabras que reflejan lo mucho que me esforcé para que el capítulo quedara besho 💓💕💘✨

¡Espero que les guste! uwuwu 👍😘💕

Soobin sentía que en cualquier momento se desmayaría, pero en su interior sabía que tarde o temprano volvería a pisar aquel lugar. Mientras los cuatro avanzaban por el estacionamiento que estaba enfrente de la antigua estructura que se alzaba justo delante de ellos al otro lado de la calle, en su mente se daba ánimos para no arrepentirse de haber ido.

Al cruzar la calle, el leopardo no pudo evitar quedarse mirando la entrada del lugar y detuvo el andar de sus pasos cuando estaban por pasarla de largo, pues muchos recuerdos le llovían en ese momento. Durante años esa fue su rutina al llegar el fin de semana, todos con la imagen de su familia asistiendo a esa misma iglesia cada domingo; si se esforzaba podría volver a escuchar las voces de su familia repitiendo las plegarias que el sacerdote predicaba; si se esforzaba podría volver a escuchar la melodiosa y cálida voz de su madre cantando las alabanzas del coro de la iglesia; los regaños en susurros que ella le lanzaba para que prestara más atención a la palabra del Señor; los elogios que recibían sus padres de la mayoría de los presentes por tener una familia tan hermosa y dedicada a asistir semanalmente a la casa de Dios. La iglesia católica está ubicada lejos del centro de la cuidad, en una zona humilde de clase media donde su madre se crió hasta la adultez, por lo que todos los que vivían en el vecindario se conocían unos a otros y conocían a su madre de toda su vida, por eso se mudaron ahí en primer lugar, cuando Geon-Hak y él tenían diez y trece años respectivamente.

Soobin nunca fue tan devoto a la religión que sus padres le inculcaron, aún así se comprometía a asistir con su familia. Pero luego de lo sucedido, ya todo era distinto, y él sabía que nada volvería a ser igual.

Por un iluso momento creyó que tal vez, entrarían ahí, pero cuando siente que Geon-Hak tira de su mano, la cual aún sigue sosteniendo, sabe a dónde se dirigen antes de que sigan avanzando por la calle.

Un estremecimiento le recorrió entero cuando se detienen a pocos pasos de distancia de la entrada de aquel lúgubre lugar.

El cementerio.

Un suspiro tembloroso escapó de sus labios y sintió como el nudo en su garganta se apretó otro poco, estaba costando todo de sí para controlar las ganas de llorar enfrente de todos.

—Espera un momento— dijo el beta para después soltar su mano, y antes de poder articular alguna palabra, lo observa acercarse a YoungJo a pedirle las llaves de su vehículo para luego trotar de vuelta al estacionamiento el cual se encontraba con pocos automóviles aparcados.