Suspiro III

1K 9 3
                                    

Suspiro III

X. M. A.C

Cap.3 Mi salvadora 

La puerta de mi habitación se abrió como si tuviera vida propia y se dejaron ver mis padres, con una mirada que dudaba haberla visto en años, estaban rebosantes de satisfacción, con sus pupilas incrustadas en mí. Y con aquel susurro constante en mi cabeza. Curiosa la capacidad para entender cada uno de los fragmentos del lenguaje en que hablaba mí madre con tanta maestría. Cuando apenas recordaba haberla estudiado en clase, si es que realmente la había estudiado alguna vez y de eso hacía ya bastante tiempo. Parecía una mezcla de diferentes lenguas e idiomas, no conseguía descifrar del todo su origen.

(El cielo destellaba en pequeños silencios el sombrío húmedo de la noche. Entre silencios el rugido de Dioses estallaba en cada rincón de NieblaAzul.)

En estos momentos intentaba hallar dentro de la misma rareza de las circunstancias, algún motivo que me hiciera darle algún sentido a todo lo ocurrido, a esta éter sombría que ha quedado impregnada en cada parte de mi organismo, en cada pedazo de pared, en cada…

-Steve es hora que empecemos a darte respuestas a cualquier duda que tengas sobre lo ocurrido en estos días atrás y por supuesto en el extraordinario aspecto que reluces ahora. – Me dijo Mamá con una leve sonrisa inclinada hacia la oreja derecha de su cara.

-¡Diablos!- Exclamé bastante enfurecido. -No exactamente.- Puntualizó Papá con tono irónico.

-¿¡¡¡Como habéis permitido que durante tantos días estuviera tan mal!!!? Y lo que me parece aún más sorprendente es la frialdad con la que lo habéis ocultado. –

-Hijo, aun estabas en mitad del proceso, no podíamos poner en peligro cualquier sospecha que obstaculizara tu transformación.- Dijo Mamá muy segura de ella misma.

-¿Proceso? ¿Pero qué proceso? Qué tipo de criatura o bicho raro soy, me habéis destrozado la vida.-Hijo, entendemos tu irritación hacia nosotros, pero debes de entender que esto no ha sido nada fácil para tu madre y para mí, hemos tenido que protegerte a cada instante en el que se acercaba el día, a excepción claro está, de ayer con la incidencia causada en nuestra casa, se nos escapó de las manos.- Dijo mi padre con los ojos puestos en la mayor sinceridad que puede transmitirme en situaciones complicadas.

Con las manos en la cabeza, y de rodillas en el suelo, no pude contener mi odio hacia ellos, mi mundo se venía abajo y entre un mar de lágrimas, lágrimas de cristal rotas como mi alma. Me desvanecí por momentos en un paisaje desolador, mientras a cámara lenta como si de una película en blanco y negro se tratase, se proyectara el peor de los días del protagonista. Como si un final gris, oscuro,siniestro, fúnebre, cubriera el final de mi existencia en esta vida.

-Steve debes de saber que a partir de ahora, no obtendrás de nosotros más mentiras, te prometemos contártelo todo, pero debes de comprender. Y por eso como madre, debo decirte la primera veracidad en todo esto y una es…- Dijo Rose entorpecida violentamente por un extraño y diminuto objeto que provenía de la ventana.

En esa milésima de segundo en que mamá iba a aclararme dudas, un objeto golpeó el cristal de la ventana, aunque debería decir realmente, que golpeó parte del cristal que aún quedaba en el marco. Apenas pudo llegar el objeto a golpear el cristal de mi ventana, cuando ya podía presenciarlo con antelación. Con la mirada difusa en la calle, pude observar una silueta entre las cortinas blancas, una silueta muy familiar, pero... ¿Podría ser ella? ¿Y si fuera así? ¿Qué hacía allí abajo intentando llamarme la atención en este preciso momento? Aunque me duró el interrogatorio cerebral muy poco, pues mis padres, apenas escucharon la piedra caer en la habitación para que salieran de allí a toda velocidad, dejando entre el aire una especie de niebla ennegrecida.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Feb 05, 2014 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Suspiro IIIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora