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Suena la alarma mientras hago un inútil intento de seguir dormido.

Me rindo después de varios intentos, abro los ojos lentamente, sigue reinando la oscuridad; suspiro resignado a la idea de levantarme de mi cama. Me levanto con cuidado de no pegar con el techo.

Salto de la litera con cuidado, me tambaleo un poco al tocar el suelo, camino con cuidado en la habitación oscura para llegar a la puerta; prendo el interruptor de luz, y parpadeo un par de veces para acostumbrarme a la claridad.

Mi paisaje oscuro paso a ser uno con cajas tanto vacías como llenas, pedazos de comida sin acabar por doquier y ropa por todos lados, miro a la litera y encuentro a Mario, en una posición patética.

Me acerco  a el en silencio aunque dudó que lo levante, ni un concierto de Green Day lo despertaria, a unos cuantos centímetros de el, alcanzo a ver que esta teniendo su "gloria matutina y esta susurrando sobre una tal Jess; que asco de tipo y solo hace dos semanas se entero como hacer vida.

Salgo del cuarto para quitarme esa imagen de mi cabeza, bostezo al entrar a la cocina, me acerco al refrigerador y saco una cuantas cosas y lo cierro.

Pongo todo en la barra, en el orden que los voy a utiliza, saco unos cuantos platos, vasos, etc. Y empiezo a hacer el desayuno, empiezo rompiendo unos cuantos huevos en un tazon rojo. 1, 2, empiezo a taradear una de mis canciones favoritas, 3, 4, les pongo un poco sal y empiezo a batir como si no hubiera un mañana.

Termino y saco un sartén, lo pongo en la estufa, me volteo a la barra, y tomo el tazón, volteo hacia la estufa y veo una nota en el sartén, que carajos.
          
           Hijos no podre llevarlos a la
            escuela, me tuve que ir
          temprano a la oficina...
                          Papa

Voltee al reloj de la cocina, 7:16. Solo cuatro minutos y llega el autobús pero no estaremos listos en cuatro minutos, ni las mujeres lo están en ese tiempo, y menos con Mario.

Tomo la nota y subo corriendo las escaleras, llego cuarto esperando que ya este levantado, y nada. Que gran sorpresa. Veo el reloj del buró, 7:20, ahora tendremos que irnos caminando.

Vuelvo a ver a Mario y una gran sonrisa se forma en mi rostro (ya saben de esas sonrisas sínicas, la que usan los villanos antes de su risa malefica las dejo que sigan leyendo uwu), me volteo dirigiendo al baño, sin antes de tomar una toalla, de sus cosas; me la hecho al hombro, mientras empiezo a chiflar al recordar mi estupenda idea.

Entro al baño con toda calma, dejo la toalla en el lavadero, abro ambas llaves y dejo que se moje por completo. Han escuchado que cuando los niños se portan mal, mojaban  cinturón para que les doliera mas, pues voy hacer mas o menos lo mismo, cuando veo que ya esta completamente mojada, cierro las llaves al unísono, tomo la toalla con cuidado de no mojarme, y la empiezo a exprimir hasta que no tenga ninguna gota, después de un rato, salgo con esta y entró otra vez al cuarto.

Mario sigue dormido, que sorpresa, me acerco con cuidado moemtra enrollo la toalla, la pongo en mi mano cúa del llego a su cama, la levante con cuidado que no se desaga y la bajo a toda velocidad, mientras esta se desenrolla en el aire y cae en seco en el abdomen de Mario.

Bello bichos, ¿Como están? Espero que bien, por favor digan si les gusto el primer capítulo, y por favor denle un voto  a la historia, se los agradecería de todo corazon, me tengo que ir el deber llama. Chao
                   REGINA

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⏰ Última actualización: Apr 08, 2015 ⏰

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