Mi infierno perfecto

7-Tan Cerca Del Encuentro

Después de lo de Astaroth mi confianza se sentía pisoteada, me replantee varias veces el regresar al infierno y quizá hacer lo que más le gusta a belcebú, que le rueguen, y los años de condena no importará en lo más mínimo si es a ella a quien eh dejado, ¿acaso eh llegado tan lejos para nada?.
Mis pensamientos se esfuman al sentir que una luz ilumina el pequeño cubículo en el que iba, me hago un pequeño ratón y corro desapercibido, ¿a donde eh llegado?. Aquí hay muchos aviones y todos me pueden ver, ¿donde me escondo?.

Salgo corriendo a una esquina de el lugar, la puerta de salida estaba cerca, si alguien me ve podría armar algún escándalo, extrañamente a los terrenales no les agradan los ratones y los usan de las formas que ni en el infierno se habían pensado, y eso que fui torturador por dos meses, eh matado humanos y demonios como si ninguno me importará... Y bueno, así Es.

Me transformó en humano, al estar en la salida ningún "oficial" me puede detener, esas cosas sienten que tienen el poder, no saben lo pequeños que son en este y en otros mundos.

- hey - le gritó a un hombre solitario, parado en una de las puertas frente a mi esperando llamar su atención. -

- ¿hu? - contesta sin siquiera mover los labios. -

- ¿cómo... se llama este lugar?

- el hombre ríe como si eso fuera una broma - Massachusetts, amigo. -

- oh - no puedo decir nada más al tener la alegría de haber llegado a mi destino, casi la encuentro, casi la veo - no soy tu amigo. -

El lugar se siente algo caluroso, quizá es la humedad del lugar, este calor me gustaba, me recordaba a mi lugar de trabajo. Aún tengo que caminar y llegar a su casa, al mapa le falta un poco por recorrer y en calles va a ser más facil. Sólo debo apurarme y ver si está en su vivienda.