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Ambos chicos estaban en el apartamento, NamJoon jugaba video juegos y YoonGi buscaba en su celular anuncios de empleos, debía encontrar un trabajo pronto, aunque no pagaba renta de momento, si le pesaba no tener dinero.

La puerta sonó repentinamente llamando la atención de los chicos del interior.

— YoonGi, ve tú — Habló NamJoon sin despegar sus ojos de la pantalla del televisor — Es online, no puedo ponerle pause — Miró fugazmente al rubio.

Con un suspiro, YoonGi se puso de pie y caminó hacia la puerta, mas cuando la abrió, se congeló en el umbral.

— Hola vecino — Saludó TaeHyung alzando un contenedor de alimentos — Traje flan — Agitó el contenedor — Como agradecimiento por lo de ayer — Sonrió.

¿Ayer? YoonGi recordó todo, incluso lo que vio durante la noche y todo su cuerpo se tensó, no podía decir ni una palabra.

TaeHyung frunció el ceño un poco incómodo ante el silencio.

— ... ¿No te gusta el flan? — Preguntó preocupado el pelinegro.

— ¿Por qué tardas tanto? ¿Quién es? — La voz de NamJoon apareció en el pasillo, asomándose para averiguar de quién se trataba — Ah, hola TaeHyung— Saludo con entusiasmo.

— Hola, traje flan — Volvió a mover el contenedor.

— Bien — A NamJoon le brilló la cara —. Si quieres pasa y come con nosotros, voy a poner los cubiertos — Caminó en dirección hacia la cocina.

TaeHyung volvió a mirar a YoonGi hecho estatua.

— Ten, iré por el chocolate — Le entregó el objeto y YoonGi lo recibió automáticamente, en cuanto se cerró la puerta, finalmente el rubio reaccionó.

Tenía que controlarse, seguro que se estaba comportando de manera estúpida y estaba asustado al de sonrisa cuadrada, actuar con normalidad, eso era lo que debía hacer.

Volteó y caminó hacia el comedor y dejó el contenedor sobre la mesa, al tiempo que NamJoon acomodaba platos y cucharas.

Al poco rato, llamaron a la puerta otra vez, sólo que NamJoon fue quien se movió para abrirle al pelinegro.

YoonGi se sentó a la cabeza de la mesa cuadrada, en tanto NamJoon a la derecha y TaeHyung a su izquierda, arrinconado entre la mesa y la pared.

El pelicastaño sirvió en los platos y se sentó. TaeHyung tomó la botella de chocolate y echó sobre su postre.

— ¿Ustedes quieren? — Preguntó TaeHyung alzando la botella.

YoonGi todo ese tiempo trató de esquivar su vista del pequeño, pero esa pregunta le hizo mirar.

— Si — Respondió NamJoon.

Sorpresivamente, el peli negro estiró su cuerpo sobre la mesa para llegar al otro extremo, YoonGi lo tenía al frente, en una posición similar a la que había visto antes. TaeHyung usaba sudaderas anchas, pero en esa posición su delgado cuerpo se acentuaba, sobre todo su trasero, redondo. "Demonios" YoonGi cruzó sus piernas.

— ¿Tú quieres chocolate? — El pelinegro miró a YoonGi esperando su respuesta expectante.

— S-Si — Tartamudeó el rubio.

Tengo se Inclinó hacia él, su sudadera era de cuello ancho, tenerlo inclinado y de frente le dio una maravillosa vista de sus clavículas.

— ¿Y cómo te ha ido con las exposiciones? — Preguntó NamJoon una vez TaeHyung se sentó correctamente.

El Agujero en la Pared ✧ YoonTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora