Capítulo 12 ~Beso~

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Me gusta Natsu.

El día de la boda de Gajeel y Levi fue cuando me di cuenta de esto. Que me gustaba. Que quería estar a su lado.

Cuando yo era niña solo tenía a mis dos hermanos, siendo yo la mayor. Siempre que llegábamos a un lugar nos expulsaban por mi culpa. Debido a mi cuerpo que tenía partes de demonio.

Lo detestaba. Yo era la mayor de los tres hermanos y por mi culpa ellos no podían tener una vida en paz.

Un día, llegamos a un gremio, un señor que salía de ahí nos vio y nos invitó a entrar. Su nombre era Makarov.

El nos dejo unirnos a su gremio, Fairy Tail.

Era un lugar un poco complicado. El ruido no paraba, discusiones no se dejaban de escuchar y a veces todo el gremio se ponía a pelear de la nada, pero aún con todo eso, era agradable.

Mis hermanos estaban felices y yo también.

Ellos dos decidieron aprender magia de transformación para ser como yo. Eso me hizo muy feliz. Que ellos hicieran eso por mi

Yo también aprendí magia de transformación. Gracias a eso pude controlar mi cuerpo y lucir como una persona normal.

Poco tiempo después de que no unimos al gremio, llegó el. Natsu Dragneel. Era un niño de la edad de lissana, con pelo rosa.

El era energético, siempre se metía en peleas con quién fuera, ya sea conmigo, Erza o Gray. También siempre sonreía, o eso es lo que nos hacía ver.

Cuando no estaba con nadie, siempre tenía una expresión diferente, que dejaba ver lo que realmente sentía.

El se encontraba triste. Su mirada y su cara hacia abajo lo demostraban.

La razón, la búsqueda de su padre Igneel. Un dragón que había criado a natsu y que lo abandonó por razones que en ese momento eran desconocidas.

Lissana fue la primera en notarlo.

"Mira nee, natsu cuando está solo siempre se ve triste."

"Aaah y eso a mí que, pues ve a jugar con el o algo."

En ese momento mi personalidad era un poco grosera, así que eso fue lo que le dije a lissana. Realmente me preocupaba por natsu, el era un miembro de Fairy Tail, pero, ¿que podía hacer?, era lo que me preguntaba en ese entonces.

Pero al final no tuve que hacer nada. Natsu pudo salir adelante por si solo.

Lissana siempre salía a jugar con el. Cada vez que llegaba me contaba todo lo que hacían, ella realmente se le miraba feliz.

Paso el tiempo y todo siguió con un ritmo normal. Hasta que...

Ese incidente sucedió.

La muerte de lissana.

Al final resultó que no estaba muerta, si no que fue transportada a otro mundo, pero en ese momento nos afectó mucho a mi y a mi hermano.

Yo en ese momento me encontraba destrozada. No tenía ganas de nada. Solo me la pasaba pensando en lissana.

Poco después, Elfman salió de la casa. Yo lo seguí ya que estaba preocupada por el.

El solo estuvo caminando sin rumbo, adentrándose más en el bosque, hasta que lo vio. A quien vio era Natsu, que se encontraba frente a la tumba de lissana que el mismo había construido.

"Perdon Natsu, si tan solo tu hubieras ido, tal vez..."

Elfman se puso a llorar mientras que le decía eso a Natsu.

~La tristeza del Dragón~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora