En la vida de un Famoso / Vidas #1

2

Grace.

Desde atrás del escenario observaba la pantalla de la presentación con Alex y algunos miembros del staff.

Perfect Fire tenía un estilo único y todas sus canciones eran geniales. Observe a los chicos cantar Inferno's Harmony, Rhapsody of Shadows, Echoes of Rebellion y pulsar passion.

La presentación de los chicos pasó rápido, y cerca de la media noche, los chicos insistieron en traerme a casa. No tuve mas remedio que aceptar ante la petición de siete hombres quienes no iba a cambiar de parecer.

— Nos vemos, cariño, saluda a tú madre y a Dhap de mi parte. –hablo Asher antes de bajarme de la camioneta en la que iba junto con Lucas, Nathan y Asher.

— Espero que pronto puedas llevarnos a nuestra pequeña Dhap. —hablo Lucas.

— Estoy de acuerdo la extrañamos como al mierda. —hablo Lucas.

Sonreí al escucharlo, Lucas era el miembro que habla con muchas groserías y era demasiado directo diciendo siempre lo que pensaba.

Los chicos amaban a Daph, desde el momento que les conté que estaba embaraza ellos se alegraron tanto que realizaron Una fiesta en nuestro honor. Siempre había imaginado que cuando estuviera embrazada de mi primer hijo el padre iba a estar a mi lado, pero no había sido así, en cambio Alex y los chicos de la banda habían estado junto a mí apoyándome, incluso me habían dicho que a Dhapne jamás le iba a faltar una figura paterna.

Aún recordaba el día que comencé con él trabajos e parto, había sido un día tan caótico.

— Pronto podrán ver a Dhap, descansen.

Baje de la camioneta negra, y me despedí de los chicos, me dispuse a entrar a casa. En cuanto estuve a dentro de escucho como el motor de la camioneta se encendía para después marcharse.

Camine en silencio, hasta llegar a la sala de estar donde mi madre observaba una película, junto conmi hija quien se encontraba dormida en su carriola.

— Buenas noches a mis dos grandes amores. —hable con felicidad mientras le daba un beso en la mejilla a mi madre.

Camine hasta donde estaba mi hija y la observe dormir por unos segundos.

Un año después que comencé a trabajar conocí a David; el padre de Dhap. Que cautivada ante su encanto y personalidad extrovertida. Él era reportero, así que lo había conocido en algunas de las entrevistas que habían dado los chicos en aquel tiempo. El pidió mi número y meses después comenzamos una relación. Fue muy tarde cuando me di cuenta que solo me usaba para sacarme información sobre la banda, aun que nunca solía decirle nada. Cuando en di cuenta de que estaba embarazada hablé con él, después de eso no supe nada más de él. Solo había dejado una nota diciendo que había conseguido un gran puesto en otro país y que pensaba que el bebé no era su hijo, que seguramente el padre era uno de las chicos de la banda.

Había pasado una época muy obscura, pero gracias a los chicos de la banda y mi madre pude salir adelante.

— ¿Como te fue? –prento mi madre.

— Fue un día muy ajetreado ya sabes, lo normal.

Después de contarle mi día a mi madre ambas decidimos que era tiempo de ir a dormir. Antes  de dormir tome un muy relajante baño, y me aliste para ir a la cama. Me sentía muy feliz al saber que tendría todo el fin de semana libre antes de volver al trabajo.

Al día siguiente mi madre tuvo que salir de la ciudad a visitar a mi hermano ya que su esposa, quienes se habían convertido en padres en el transcurso de la noche.

El sábado pasó tranquilo en compañía de Dhap. De verdad disfrutaba este día debido a que a pesar de los años aún era difícil acostumbrarse a la agenda tan apretada de la banda, y mas ahora que en el último año se habían convertido en un fenómeno mundial.

Por la noche, me acosté a dormir junto a ñ mi pequeña en la cama. En cuanto me asegure que Dhapne  estuviera profundamente dormida, me entregue a los brazos de morfeo.

El sonido de mi celular inundó toda la habitación causando que me despertara. Me levante y conteste el teléfono sin ver quien habla, pero supuse que era algún asunto del trabajo.

— Buenas noches, soy el oficial Thomas Smith, hablo de la estación de policía en la zona norte ¿Usted es Grace Hill? –hablo un hombre del otro lado de la línea.

Fruncí el ceño ante sus palabras.

— Si, soy yo oficial, ¿sucede algo?

— Asher Harris, se encuentra en la estación sur de policía, debido a que conducía bajo efectos del alcohol y estupefacientes.

Al escuchar hablar al oficial, senti como mi alma abandonó mi cuerpo.

— ¿Que? –fue lo único que pude pronunciar ante mi incredulidad.

— El señor Harris, uso su derecho a una llamada para hablar con usted. –explicó el oficial– Nos dijo que habláramos con usted, y que hablara con su abogado, sin mencionarle esto a nadie más.

— Gracias por hablar. –respondí en un tartamudeo– Iré en seguida.

— Nos vemos luego señorita.

La llamada se cortó y me levante de la cama incrédula ante la llamada que había tenido.

Volví a tomar mi celular y llamé a Helena; mi vecina, amiga y niñera ocasional de Dhapne. Sabía que era de madrugada pero ella había dicho que podría hablarle a cualquier hora. Mientras esperaba a que contestara, busque algo de ropa en mi closet.

— Hola Grace. —contestó una adormilada Helena— ¿Sucede algo?

— Perdona Helena, por despertarte. –le dije– Tengo que salir de urgencias, ¿podrías cuidar a Dhapne?

—Claro, estoy ahí en menos de diez minutos. – me responde y cuelga la llamada.

Entro a la ducha y me doy el baño más rápido de mi vida, cuando salgo arreglada se escucha como suena el timbre. Rápidamente bajo a la primera planta y abro la puerta a Helena.

—Hola, muchas gracias por venir. –le digo mientras la observo con gratitud.

— Sabes que siempre puedes contar conmigo.

Helena, era mi vecina y mi amiga; a pesar que fuera mucho menor que yo. Helena era una gran chica, era demasiado inteligente y trabajaba de niñera en sus ratos libres. Además quería mucho a Dhapne, y no había mejor niñera que aquella chica pelinegra.

Rápidamente le expliqué que mi niña estaba dormida y que tal vez regresara hasta cerca del medio día. Helena me dijo que no me preocupara y que ella cuidaría de mi pequeña.