Para salvar a un genio

Capítulo 2

Tony se despertó bruscamente mirando alrededor de la habitación desconocida con los ojos muy abiertos y preocupados mientras su cerebro neblinoso trataba de pensar en los eventos de la noche anterior que lo habían llevado a estar en esta habitación desconocida.

Se había acostumbrado a despertarse en la casa de campo en las afueras de Stirling, y definitivamente esta no era su casa allí.

Rápidamente miró debajo de las mantas y se sintió aliviado al darse cuenta de que, aunque le faltaban los jeans, todavía estaba vestido con boxers y su camiseta, y definitivamente no había nadie en la cama junto a él. La habitación tenía más una sensación de "habitación libre" al pasar por las pocas cajas de almacenamiento y algunos artículos que obviamente estaban aquí para guardarlos y mantenerlos fuera del camino.

Frunciendo el ceño, se frotó los ojos mientras trataba de recordar la noche anterior. Se había permitido el lujo de ir al pub local a tomar algo. Mucha gente pensó que tenía un problema con el alcohol, pero era algo que nunca se permitiría que se convirtiera en un problema considerando que había crecido con la ira alimentada por el alcohol de Howard. Era la rara posibilidad de que se permitiera emborracharse de verdad, pero después de un mes y medio allí, había bajado al pub para pasar la noche, solo con la intención de emborracharse.

Ahora todo lo que tenía era un fuerte dolor de cabeza, el recuerdo de un canto terrible y unos brillantes ojos verdes.

Un golpe en la puerta lo sobresaltó y se agarró a las sábanas cuando un hombre asomó la cabeza en una sonrisa al darse cuenta de que Tony estaba despierto.

"Oye, ¿cómo está tu cabeza?" Preguntó el hombre, abriendo la puerta completamente y entrando en la puerta ahora, permitiéndole a Tony la deliciosa vista de un pecho firmemente musculoso estirado sobre una camisa roja con un león en la parte delantera, y pantalones de pijama rojos bajos que le llegaban a la altura de las caderas. . Su cabello negro era un revoltijo de cabello negro y sus ojos verdes eran definitivamente los que recordaba de la noche anterior, pero tenían más sueño, revelando el hecho de que el hombre no estaba muy despierto.

"Yo... erm... ¿dónde estoy?" Tony preguntó con nerviosismo.

"Ah mierda, estaba preocupado de que no lo recordaras. ¡Lo siento! Soy Harry Potter, soy un amigo de Angie, te reconocí en el pub. Hablamos pero ambos estábamos bastante borrachos, ofrecí mi habitación libre porque no me sentí bien que te dirigieras a tu casa a esa hora de la noche, incluso en taxi, puedes llamar a Angie si quieres ", dijo Harry mientras comenzaba a palpar sus pantalones de pijama luciendo preocupado.

"Te tomo la palabra, recuerdo a Angie hablando mucho sobre Harry," Tony sonrió, relajándose un poco ante la seriedad del otro. Estaba horriblemente borracho.

"Sí, me dijiste que ella había estado arrullando que yo hiciera cosas por ella, y compartiste que pensabas que estaba inventando cosas para que yo hiciera para conseguir una buena comida", se rió Harry.

"Eso suena bien", se rió Tony. "¿Puedo preguntar algo?" Miró a Harry.

"¡Por supuesto!" El hombre era como un cachorro demasiado grande.

"¿Te recuerdo haciendo magia?" Preguntó Tony.

"Sí, soy un mago como Angie, bueno, obviamente no como Angie, soy un hombre, ella es una bruja" tartamudeó Harry.

"Eso pensé, o eso o mis pantalones decidieron caminar solos hasta la canasta de la ropa sucia", se rió Tony. "También..."

"¿Sí?" Preguntó Harry, preocupado cuando Tony se cubrió la cara.

"¿Hice karaoke?" Tony gimió.

"Sí lo hiciste, lo siento", se rió Harry acercándose para sentarse al pie de la cama. "Teniendo en cuenta lo borracho que estabas, fue bastante impresionante".