A Silent Voice

Mentiras a tutiplén

Una mentira tras otra.
¿Por qué te esfuerzas en hacerla cierta?
¿Per qué la decoras como si no fuera a hacer nada?
Sigue siendo una mentira.

La de veces que me han intentado mentir a la cara, ellos seguros de que decían cosas verdaderas, y yo sabiendo toda la verdad que escondían esas palabras. Que no diga nada, no significa que no me entere de las cosas, aunque actué como si nada pasara. Soy consciente de todo lo que me rodea, aunque tu creas que no me doy cuenta.

No sigáis,

se que me engañáis,

no os voy a creer,

digáis lo que digáis.

+ Dime una cosa, ¿eres sincero contigo mismo o te autoconvences de que no sientes algo por miedo a sufrir más daño? ¿Por qué te engañas a ti mismo? ¿No sientes lo contrario?

- ... -sin decir nada desvié la mirada hacia el otro lado.

+ No me trates de tonto. El día que te conocí tus ojos decían lo contrario de lo que parece ser que dices ahora.

- ¿Qué debería hacer?

+ Se sincero, contigo mismo. ¿Lo sientes? ¡Dilo! No lo escondas dentro de ti, no te lo quedes. Vas a sufrir...

- Si lo digo voy a sufrir. Si lo admito voy a sufrir.

+ Y si te lo callas también.

- Pero así dolerá menos.

+ Si no dices lo que sientes o piensas, puede que hagas que otra persona se sienta insegura de lo que quiere también.

- ¿Qué dices?

+ Te callas por miedo a pasarlo mal. Por no pasar por cosas dolorosas otra vez. Por romperte.    ¿Y si otra persona se siente igual que tu? ¿No crees que le ayudaría saber lo que sientes de verdad, aunque tu cerebro diga lo contrario?

- ¿Qué me quieres decir?

+ Que no digas solo lo que creas querer. Di lo que sientes. Más bien, admite lo que sientes de verdad. Créeme, no te va a doler, no te va hacer sufrir. Es distinto. Te hará sentir mejor que nunca. No te mientas más, sé sincero contigo mismo. -me dijo a la vez que me guiñó un ojo y me daba un golpecito a la espalda.