Carrie, vacaciones de verano [Libro 2 ✔️]

🏕️ Capítulo 5 🏕️

Nube

Me senté al lado de Ashley al verla sola, sentía la necesidad de acercarme a ella, no sabía porque pero por alguna razón lo sentía.

— Hola — saludé captando así su atención

— Hola — me mostró una pequeña sonrisa

— ¿Cómo estás? — me sentí patética por mi pésimo intento de hacer conversación

— Bien, gracias. ¿Y tú?

— Puedo respirar — respondí

Asintió sin más y volvió la mirada al frente.

— Así que..., ¿te gustan las salchichas? — pregunté al ver cómo acercaba una salchicha al fuego, la cual estaba encajada en un largo palito de madera

— Son ricas — contestó sin mirarme, revisó su salchicha y luego volvió a acercarla al fuego — ¿No quieres una?

— No tengo hambre — hice una mueca — ¿Tienes novio? — pregunté sin pensar

— Ah... — me miró sorprendida — Sí, su nombre es Dylan, Dylan Wolfarth

Comencé a ahogarme con mi propia saliva al escuchar dicho nombre, de cuya persona, no me agrada en absoluto.

— Lo siento, falsa alarma, aún no muero — comenté ante la mirada confundida de todos — ¿Nick lo sabe? — pregunté cuando todos dejaron de prestarme atención

— Hamm, pues no, aún no le digo, o no del todo, quiero decir, sabe de la existencia de él pero en realidad no sabe tanto, aunque no somos hermanos tenemos años viviendo juntos y a veces suele portarse como un hermano mayor celoso y sobreprotector, lo que es curioso considerando que yo soy mayor que él por tres años, pero al parecer no le importa aunque a mí sí pero...

— Ya entendí — le interrumpí al ver que no paraba de hablar — Pero, hablando más específicamente, ¿sabe el nombre de tu novio?

Ashley frunció el ceño ante mi pregunta.

— ¿Tiene algo de malo su nombre? ¿Lo conoces o qué?

Tragué saliva y pensé en como responder esas dos preguntas. ¿Cómo le diría a la prima de mi mejor amigo qué su nuevo novio era uno de mis mayores agresores en el campamento?

— ¿Te trata bien? — no pude evitar preguntar

— ¿Qué son todas estas preguntas, Carrie? No es que me molesten, pero en serio me desconciertan. ¡¿A caso Nick te envío?!

— ¡No! — exclamé — Es que, estaba algo preocupada, eso es todo — me encogí de hombros y sonreí para tranquilizarla

— ¿Preocupada? ¿Por qué estarías preocupada? No te entiendo

— Ah... — ¿Ahora qué se suponía que debía decirle? — Por todo lo que pasó — agaché la mirada y froté mis manos — Con Chad, quiero decir, me preocupaba mucho tu reacción y ya sabes...

— Sé de lo que hablas, y te voy a confesar algo que nunca le he dicho a nadie, ni siquiera a Nick — se acercó un poco más a mí para hacerlo más confidencial — El día que conocí a Chad, fue un día antes de que se fuera al campamento. Recuerdo que nos conocimos en la plaza del centro comercial, él salía del cine y yo de una heladería, cada quien con sus amigos claro, y ninguno se fijó por dónde caminaba y pues chocamos — rió al recordar aquella anécdota — Terminó con toda su camiseta embarrada con helado de chocolate y chispas. Me sentía tan avergonzada, pero aún así no pude evitar reírme a carcajadas, y entonces él me dijo que si le causaba gracia verlo así, a lo que yo respondí que ese disfraz de helado le quedaba bien — ahora ya no reía, pero aún conservaba una sonrisa en su rostro — Y entonces él me dijo que yo también debía disfrazarme y me arrojó palomitas, me sorprendí tanto que por alguna razón volví a reír, él también parecía sorprendido por mi reacción, pero aún así terminó riendo conmigo