Juegos, Mentiras... ¿Y Amor? (Jenlisa) Lesb

Bienvenida Lisa

Heechul: listo señoritas, hemos llegado, - les ayudó a bajar del auto y se retiró de ahí. -

Jisoo: vamos Jen, tenemos que avisarles a papá y a mamá que ya llegamos.

Jennie: lo que quieres es ver a esa chica tonta que se encuentra en la casa.

Jisoo: sería bueno que ella tuviera una amiga aquí ¿no te parece?

Jennie ya no respondió al comentario de su hermana, en el fondo ella también tenía mucha curiosidad de saber cómo era esa chica, sólo que no quería demostrarlo frente a nadie, siempre se había caracterizado por su carácter fuerte y porque eran otros los que morían de ganas de estar cerca de ella.

Tiffany: bueno Lisa, creo que lo mejor será que platiquemos en otro momento, ahora ya no tardan en llamarte así que suerte.

Lisa: gracias Tiffany, - ahora se sentía un poco más nerviosa de conocer a las hijas de los señores Kim. -

Y efectivamente a los pocos minutos Lisa escuchó como la señora Seo Ye-ji la comenzaba a llamar muy animadamente, así que se levantó no sin antes mirar nuevamente a esas tres chicas que se encontraban con ella en la cocina.

Sunny: suerte, - le guiñó y le sonrío. -

Tiffany: tranquila, todo estará bien.

Sin más les sonrió y salió de la cocina, cuando entró a la sala se sorprendió al ver a dos chicas muy guapas junto a los señores Kim, la más alta de ellas tenía una linda sonrisa, sus labios formaban un pequeño corazón, mientras que la más bajita tenía unos ojos como los de un felino, muy lindos su mirada dejó hipnotizada a Lisa no había conocido a una chica tan hermosa como ella sin embargo su semblante serio daba un poco de miedo.

Seo Ye-ji: ven, Lisa, quiero presentarte a mis hijas ella es Jisoo, la mayor.

Jisoo: hola, Lalisa, mucho gusto en conocerte.

Seo Ye-ji: y ella es Jennie.

Jennie no dijo ni una sola palabra, la realidad era que al igual que Lisa ella había quedado sorprendida con la linda chica que tenía delante, era alta, delgada, piel blanca, unos ojos hermosos, ella a diferencia de su hermana no había descubierto su orientación por completo, nunca había salido con alguna chica y jamás le había interesado alguna... hasta ahora.

Lisa: mucho gusto, yo soy Lalisa Manoban, pero por favor solo díganme Lisa.

Jennie: ¿ya me puedo ir a mi recámara? - dirigió su mirada su padre al cual tenía a un lado. -

Kim Soo-hyun: Jennie, por favor sé más cortes.

Jennie: hola, Lisa... listo ¿ya puedo irme? - el sarcasmo con el que había saludado a la chica se notaba a  kilómetros de distancia. -

Seo Ye-ji: Jennie...

Jisoo: dejá que se vaya mamá, Lisa ¿quieres ir por un café?

Lisa: yo...

Jennie: sí, por favor vayan así me concentro más si estoy sola, - sin darle tiempo a que su padre pudiera decir algo más dio media vuelta y se dirigió a su recámara. -

Seo Ye-ji: lo lamento mucho, Lisa, pero vayan por esa café así se conocen un poco mejor.

Jisoo: espérame iré a cambiarme y nos vamos ¿si?

Lisa: claro, yo creo que también necesito ir por un suéter.

Jisoo primero se dirigió la cocina por un poco de agua así que Lisa fue la primera en subir para llegar a la que era su recámara y poder tomar un suéter, no estaba segura de que tan lejos irían pero no quería preocuparse si le llegaba a dar un poco de frío, y justo cuando estaba pasando por la recámara de Jennie ella salió topándose de frente, las dos se quedaron mirando directamente a los ojos, Lisa no podía dejar de mirarla por más que su mente se lo estuviera pidiendo, no fue sino hasta que escuchó la voz de esa chica de mirada gatuna.

Jennie: ¿Tengo algo en la cara?

Lisa: ¿Perdón?

Jennie: ¿Que si tengo algo en la cara? No me gusta que me miren por tanto tiempo, te voy a pedir que te mantengas alejada de mí ¿entendiste? - colocó su dedo índice en el pecho de Lisa empujándola un poco hacia atrás. -

Lisa: lo siento, no era mi intención incomodarte, - siempre trataba de hablar lo menos posible, al no hablar bien el idioma lo que menos quería era cometer algún error, ella sabía que en ese país los honoríficos eran muy importantes, así que mientras aprendí a dominar el idioma lo mejor era mantenerse al margen de todo y todos. -

Jennie: no me incómodas, me molesta verte, - sin más volvió entrar a su recámara cerrando la puerta con mucha fuerza. -

Jisoo: ignorala, ella es así con todos, - Lisa volteó al escuchar la voz de Jisoo quién se encontraba justo detrás de ella. -

Lisa: ¿ Porqué?

Jisoo: podría decirse que es porque está LOCA, - había gritado, bien sabía que su hermana le estaba escuchando del otro lado de la puerta, - no le hagas caso, mejor apresuremonos y vayamos por ese café.

Lisa entró a su cuarto y buscó algo con que cubrirse por si llegaba a ser un poco de frío, encontró una sudadera que BamBam le había regalado antes de partir de Tailandia, era completamente amarilla su color favorito, la tomó y salió rumbo a la sala en donde espero a que Jisoo apareciera, no tardó en hacerlo se veía muy linda, con un pantalón de mezclilla, zapatos deportivos y una camisa blanca.

Jisoo: andando, el lugar no está muy lejos seguramente te va a gustar.

La cafetería donde se dirigieron quedaba sólo a 15 minutos de la casa de los Kim, al llegar y realizar su pedido Jisoo decidió que era una buena oportunidad de conocer un poco más a Lisa.

Jisoo: ¿Te ha gustado Corea?

Lisa: bueno, recién acabo de llegar pero, sí es bonito, al menos lo poco que he visto.

Jisoo: ¿Qué te gusta hacer Lisa?

Lisa: me gusta mucho bailar y la fotografía.

Jisoo: no hablas mucho ¿acaso te sientes incómoda conmigo?

Lisa: No es eso, yo en realidad no domino bien el idioma y no sé qué decir.

Jisoo: No te preocupes te ayudaré, no tengas miedo, mis papás me comentaron que irías a la misma escuela que nosotras, eso es perfecto te presentaré a mis amigas son buenas personas y con respecto a mi hermana no le hagas mucho caso.

Lisa: ¿Es grande tu escuela?

Jisoo: Lo es y debo de ser sincera contigo, está repleta de idiotas que piensan que son mejores que los demás por tener dinero.

Lisa: ok, no creo que sea un problema podría lidiar con eso.

Jisoo: me gusta que pienses así, pues bienvenida Lisa Manoban, espero que tu estadía en Corea sea placentera.

Lisa: gracias, yo espero lo mismo...