Parte 2. Inferno

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Una vez que terminó todo el problema de semental La-vinne regresó a las profundidades del Infierno a mantenerse cómodo entre todo el calor y así, comandar a las hordas de demonios que tenia a su mando gracias a Lucifer, solo que había un problema.

Belfegor es un demonio que puede controlar la mente de los humanos para lograr cosas como las que consiguió La-vinne en la tierra, solo que ese puesto ya estaba ocupado. Belfegor no suele pasar mucho tiempo en las cavernas infernales pues esta ocupado en la tierra, sin embargo la presencia de La-vinne se sentía en todo el infierno.

Belfegor se encontró con las hordas de La-vinne en el infierno e inmediatamente comenzó a eliminarlas, demonio por demonio hasta que La-vinne hizo presencia frente a su horda y a diferencia de Belfegor, La-vinne era un niño dentro del cuerpo de un demonio, el niño mimado de Lucifer.

¿Quién se supone que eres tu? No pareces de por aquí- dijo Belfegor molesto.Soy La-vinne y veo que estas asesinando a mis demonios- respondió La-vinne.Ah, eres tú, el íncubo de mierda de Lucifer, algo extraño de su parte.¿Que es un íncubo? y ¿Por qué eliminas a mi ejercito?Eso no es un ejercito, solo te dieron a esos demonios para que te entretuvieras niño. No te quiero cerca de mí y no te metas con la tierra, ese territorio ya es muy competido para que un tarado como tu se meta también- dijo Belfegor molesto mientras se retiraba.

Más tarde La-vinne fue al palacio de Lucifer donde le informó de todo lo que había sucedido y entregó más demonios para sus hordas, eran muchos más demonios de los que tenia Belfegor. Al día siguiente Belfegor fue a reclamarle a Lucifer sobre lo que había pasado y éste solo lo ignoró y lo expulsó del palacio, pero Belfegor tenía otros planes.

Fue con el ser mas poderoso en el Infierno, el verdadero guardián del inframundo, fue con la eminencia Satán. Le informó sobre lo que estaba haciendo Lucifer con las hordas a lo que la sombra más oscura hizo presencia en el palacio de Lucifer, él se negó a retirar las hordas de La-vinne pues habían hecho un trato.

Mientras ellos dos discutían, en las cavernas infernales La-vinne y Belfegor se enfrentaban usando a sus hordas uno contra otro, cuando de pronto ocurrió una gran explosión en el palacio que iluminó todo el lugar y comenzó una gran lluvia de agua hirviendo en todo el infierno.

La-vinne y Belfegor se ocultaron de la lluvia y poco después Lucifer le informó sobre lo sucedido con Satán y le ayudo a ocultarse, desde su escondite el niño dentro del cuerpo del demonio veía a interminables demonios marchar como soldados por las cavernas. Con su avance se encontró de nuevo con Lucifer.

-Angel caído ¿Que haces aquí?- dijo Satán.

-También es un gusto verte- respondió Lucifer.

-Tú eres el único que puede detener la pérdida de almas, si eliminas a ese demonio barato podremos volver a los que estábamos.

-No lo haré.

-Dime por qué- Preguntó Satán molesto.

-Veo un gran potencial en ese demonio, podría ser de gran ayuda para la llegada.

-Olvida la llegada, nosotros no tenemos por qué enredarnos en un fuego cruzado, son cosas de dios y demás.

-No le permitiré tocar a ese demonio, por más joven que sea.

Satán siguió guiando a su interminable ejercito y una vez que estuvo suficientemente lejos sacó a La-vinne de su escondite, para su mala suerte Belfegor los vio y antes de que pudiera hacer un movimiento Lucifer sacó una vasija de broce antigua donde encerró a Belfegor y la escondió por ahí.

Lucifer llamó a sus cientos de hordas a él y fue a enfrentar a Satán en persona, las hordas pelearon a muerte hasta que la de Lucifer comenzó a perecer hasta que junto con La-vinne llamaron a los miles de millones de pecadores del Infierno a combatir para ellos, así derrocando a las hordas de Satán.

Lo que no esperaban es que el gran mal personificado usaría su pode en contra de aquellos pecadores hasta que La-vinne entró a la mente de Satán, no pudo controlarlo pero al intentar hacerlo confundía a la sombra más oscura. Lucifer intentó encerrarlo en otra vasija pero ésta se quebró por la fuerza de tal ser.

Los seres que provocaban terror en los seres humanos estaban aterrorizados ante tal muestra de poder en un ser. Antes de ser asesinados, Lucifer llamó a sus hermanos caídos de los cielos que ayudaron a combatir al gran señor oscuro.

Desde los cielos infernales, se acercaron los doscientos ángeles caídos liderados por Semyazza directo a detener al gran señor. Como los hermanos que alguna vez fueron Belial, Grigori, Mefistófeles, Semyazza y Lucifer unieron fuerzas hasta crear una energía angelical pura que les permitió hacer frente al gran señor de la oscuridad.

Aquella energía pura dio paso al único día en el infierno cuando ésta iluminó cada anillo de los pecadores, con ésta misma energía Satán se retiro pero no fue eliminado, una vez que todos se encontraron bien comenzó un gran terremoto.

En el infierno se abrían agujeros y grietas en el suelo que después fueron a los cielos infernales y quebraron la brecha entre la tierra y el infierno dejando salir a las almas de los pecadores a los millones de demonios sin que alguien pudiera evitarlo. Los gritos de las personas eran tan fuertes y desgargantes que incluso retumbaban en un lugar tan distante como el infierno.

No pasó mucho tiempo cuando las trompetas apocalípticas llegaron a los oídos de cada ser viviente en la tierra, el Apocalipsis bíblico estaba sobre la espalda de cada humano, demonio y ángel. 

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⏰ Última actualización: Jul 07, 2021 ⏰

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